POR UBALDO GUZMAN M.
El geólogo Osiris de León consideró  ayer que la intención de reabrir el acceso hacia Ocoa por la Secretaría de Obras Públicas en la entrada de El Limón es buena, pero no debe quedarse ahí, sino buscar una solución definitiva.

Sugirió cortar la vía más al este, rellenar el derrumbe con material granular grueso de alta porosidad y colocar una escollera de protección contra la socavación que ocasionan las crecidas del río Ocoa en el lado oriental.

Agregó que de esa forma se definiría un talud geotécnico en base a un criterio de estabilidad a largo plazo.

Cree que otra opción para corregir el derrumbe de Ocoa es colocar subdrenes graduales, transversales y longitudinales, a fin de facilitar la salida de las aguas que infiltran en los períodos lluviosos.

Sostuvo que de esa forma la solución sería más duradera y la comunidad de Ocoa se beneficiará por mucho más tiempo, “aunque lo recomendable es una variable hacia el lado oriental, alejada del río Ocoa”.

Expresó que la causa del deslizamiento no es el falla geológica, como dijo el secretario de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, sino que el deslizamiento sobrevino porque la carretera fue construida al borde de un “escarpe arcilloso con muy baja resistencia al esfuerzo cortante”.

Agregó que durante la tormenta tropical Noel, las corrientes fluviales  socavaron por completo el pie del escarpe arcilloso, ya que en este punto el río erosiona y socava del lado oriental y sedimenta del lado occidental.

Dijo que uno de los grandes errores que la Secretaría de Obras Públicas ha cometido durante  muchos años y  diferentes gobiernos, es la aplicación de soluciones improvisadas de corto plazo, sin ningún estudio hidrometereológico, ni geotécnicos.

Insistió que es urgente la aplicación de una correcta solución geotécnica al gran deslizamiento de la carretera.

El derrumbe ocurrió en la carretera de acceso a la comunidad de San José de Ocoa, específicamente en la entrada de El Limón, a unos cuatro kilómetros al sur de la entrada de Ocoa, dijo.