KANDAHAR, Afganistán (AP).- Los ataques de aviación y artillería de la OTAN mataron a otros 92 presuntos combatientes del Talibán, informó ayer la alianza, con lo que aumentó a más de 500 el número de milicianos muertos en una ofensiva de 10 días.  Las muertes más recientes ocurrieron el domingo, cuando los insurgentes emprendieron un contraataque en la provincia de Kandahar, señaló la Organización del Tratado del Atlántico Norte en un comunicado.

La alianza añadió que las muertes en los distritos de Panyuayi y Zari se suman al deceso de 94 milicianos, reportado antes, durante un enfrentamiento en el mismo día.

Ninguna fuente independiente ha confirmado el número de muertos en la Operación Medusa, que comenzó el 2 de septiembre. Las hostilidades han impedido que los periodistas lleguen al campo de batalla.