La oxitocina es una hormona que se produce en el hipotálamo y que la glándula pituitaria libera en el torrente sanguíneo. Su función principal es facilitar el parto, por lo que se denomina la “droga del amor” o la “hormona del amor”. Al igual que las endorfinas o la serotonina es un tipo de hormona del cuerpo que promueve sentimientos positivos.
Un estudio publicado en la biblioteca virtual de Harvard y desarrollado por el editor médico en jefe de Harvard Health Publishing, Howard E. LeWine, MD, explica que la oxitocina estimula la contracción de los músculos del útero y aumenta la producción de prostaglandinas, que también aumentan las contracciones uterinas.
“A las mujeres cuyo trabajo de parto es lento a veces se les administra oxitocina para acelerar el proceso. Una vez que nace el bebé, la oxitocina ayuda a trasladar la leche desde los conductos del pecho hasta el pezón y a fomentar el vínculo entre la madre y el bebé”, consta en el documento.
Así la investigación sostiene que nuestro cuerpo también produce oxitocina cuando nos excita nuestra pareja sexual y cuando nos enamoramos. Por eso se le conoce como “hormona del amor” y “hormona del abrazo”.
Esta hormona también interviene en la salud mental, pues según estudios, se ha demostrado que la oxitocina reduce los niveles de estrés y ansiedad. Las investigaciones sugieren que esta hormona puede tener un impacto positivo en los comportamientos sociales relacionados con: relajación, confianza, estabilidad, psicológica general.
Regulación de los niveles de Oxitocina
La producción y secreción de oxitocina se controla mediante un circuito de retroalimentación positiva, lo que significa que la hormona provoca una acción que estimula una mayor liberación de su propia hormona.
Por ejemplo, cuando un recién nacido succiona un seno, se activan los mecanorreceptores del pezón y del cuello uterino, creándose un circuito de retroalimentación sensorial positiva que conduce a la liberación adicional de oxitocina en el cerebro.
El aumento de la producción de oxitocina y su secreción en la sangre hace que la leche descienda al pecho.
Cómo aumentar la oxitocina
Los niveles bajos de oxitocina se han relacionado con síntomas de depresión, incluida la depresión posparto. Los investigadores han estado estudiando si administrar oxitocina en forma de píldora o aerosol nasal podría ayudar a aliviar la ansiedad y la depresión, pero hasta ahora los resultados han sido decepcionantes. En parte, eso se debe a que a esta hormona le resulta difícil atravesar la barrera hematoencefálica.
Una forma más prometedora de aumentar la oxitocina de forma natural es el ejercicio. Un estudio observó un aumento de los niveles de oxitocina medidos en la saliva de los participantes después de un entrenamiento de artes marciales de alta intensidad. La música también parece tener la capacidad de aumentar los niveles de oxitocina, especialmente cuando las personas cantan en grupo, lo que añade el elemento de unión.
El simple acto de tocar parece aumentar la liberación de oxitocina. Darle un masaje a alguien, abrazarlo, hacer el amor o darle un abrazo genera niveles más altos de esta hormona y una mayor sensación de bienestar.
Oxitocina, amor y dolor
Aparte de las acciones descritas, se considera que la oxitocina también participa en el apego y en los comportamientos parentales: incrementa la confianza en otras personas, mejora la habilidad para inferir los estados mentales en otros y aumenta la empatía emocional. La participación de la oxitocina en los procesos de vinculación social resulta compleja, ya que este neuropéptido puede tener un efecto prosocial, pero también puede inducir hostilidad.
Por lo tanto, aun cuando la oxitocina puede ser liberada tanto de machos como de hembras mediante las interacciones sociales, los aspectos hormonales tienen una función relevante en el efecto final de esta sustancia.
Durante el enamoramiento, que es parte de la formación de un vínculo de tipo social, se liberan en el cerebro diversas sustancias, como noradrenalina, dopamina, serotonina y oxitocina. Esta última tiene una función esencial en dicho proceso.