Hoy 
POR LLENNIS JIMÉNEZ
VILLA ALTAGRACIA.- En el hospital público los pacientes tienen que aportar dinero para comprar el combustible del generador de emergencia, el que solo se enciende en horas de la noche, la sala de emergencias casi siempre se ilumina con velas y los médicos pediatras se valen de linternas de baterías y cucharas que piden a las madres para examinarles la boca y la garganta a los niños.
Sin embargo, el director del hospital La Altagracia, Frank Rodríguez, niega que tenga problemas por falta de recursos y de medicamentos.
Personas que residen en los alrededores del hospital dijeron que muchos de los pacientes en horas de la noche son referidos al hospital del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS) porque falta la energía eléctrica.
Una señora que pidió reservas de su nombre dijo que en días pasados ni siquiera atendía las emergencias, porque estaban en tinieblas.
En los casos de que las emergencias críticas se presenten en horas de la noche, los pacientes deben ser trasladados a los hospitales de la capital, porque carecen de especialistas.
Los médicos se resisten a trabajar las 24 horas del día en razón de que el hospital no tiene habitaciones para alojarlos.
Empero, Rodríguez afirmó que pronto pondrán al servicio de los doctores especialistas las dos salas que construyeron para ellos con financiamiento del Ayuntamiento y de Visión Mundial.
Redactores de HOY, que visitaron el hospital a eso de las 6:40 de la tarde, encontraron que estaba sin energía eléctrica y el pediatra Rancés Salazar atendía a una decenas de niños aprovechando la poca claridad que se filtraba por la ventana.
Al momento de revisarle la a garganta al niño, le pidió a la madre que fuera a la casa en busca de una linterna y una cuchara, porque el hospital no tiene materiales para las consultas.
Dijo que la situación es preocupante y que recientemente escuchó a enfermeras solicitarle velas a los familiares de los internos.
El regidor Daniel Miguel Mejía dijo que hace unos días llegó al hospital con su hijo aquejado de dolor en el pecho y para que se le atienda debió entregar RD$500 para adquirir gasolina para encender la planta.
El director del hospital dijo que usan el generador de emergencias en forma racional y la encienden, principalmente, al momento de operar a una persona, usar los equipos del laboratorio y del área de odontología.
Dijo que en la noche la usan de cuatro a cinco horas y luego la apagan para darle mantenimiento.
Un médico que hacía guardia en la sala de emergencias dijo que no funciona la unidad de rayos X, la cual está dañada desde hace tres meses.
Pero Rodríguez manifestó que mantienen las consultas normalmente ya que los 35 médicos no han realizado huelgas, como tampoco las 25 enfermeras.
Rechazó que envíen pacientes al hospital del IDSS. «Al contrario, nosotros recibimos del IDSS».
Advirtieron que La Altagracia es un hospital pequeño sin la capacidad requerida para asistir a la población. El centro cuenta con 35 camas y Rodríguez entiende que necesitaría 80.
