En pocos días cumplirán un mes sin poder recibir tratamiento los pacientes con enfermedades renales que son atendidos en el hospital Salvador B. Gautier porque se carece de los medicamentos y equipos necesarios, por lo que ayer volvieron a manifestar para clamar «un poco de respeto y consideración por sus vidas».

Los pacientes que requieren tratamiento de diálisis y medicamentos para el control de trasplantes estaban reunidos ayer en la sala donde deben recibir el tratamiento a la espera de asistencia.

Se quejan de que teniendo todo ese tiempo pidiendo ayuda, nadie ha dado una respuesta. Las autoridades del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), propietaria del hospital, se limitan a decir que esperan que el gobierno les dé un subsidio de RD$50 millones.

Las autoridades del hospital compraron algunos medicamentos e insumos con fondos hospitalarios pero fueron insuficientes para todos los pacientes.

Al hospital acuden personas desde todo el país para recibir tratamiento. Algunos, que viajan desde poblaciones muy distantes, llegan desde las primeras horas de la madrugada.

Una situación similar viven los pacientes que ya han recibido un trasplante de riñón. Ellos necesitan fármacos importantes para controlar el rechazo del órgano implantado.

Los que reciben diálisis tienen serias dificultades porque del proceso de “lavado de la sangre” depende sus vidas y el precio de un filtro y los demás adminículos necesarios les cuentan ahora más de RD$1,500.

La mayoría de esos pacientes no disponen de recursos, pues son personas muy pobres y que padecen una enfermedad crónica.