El filipino Manny Pacquiao reveló que cuando se enfrentó a Juan Manuel Márquez en noviembre de 2011, tuvo problemas familiares, hecho que mermó su rendimiento contra el «Dinamita»; sin embargo, aseguró que cuando pelee con Tim Bradley el 16 de junio en el MGM Grand de Las Vegas, no tendrá ninguna distracción durante el combate, reportó la agencia AP.

 «En la pasada pelea con Juan Manuel Márquez pasaba por un mal momento familiar que mermó mi desempeño arriba del ring, pero esta vez (ante Bradley) no será así», dijo el Pacman.

 El promotor Bob Arum ratificó los argumentos de Manny y agregó que la cuarta pelea entre el filipino y Márquez está por ser firmada, aunque esperarán el combate con Bradley para tomar una decisión.

 «Manny está más concentrado, no va a haber distracciones esta vez y no habrá sorpresas ante Bradley», recalcó Arum

 «La propuesta de un Pacquiao-Márquez está en la mesa. Después de Bradley lo analizaremos, no me gusta planear antes», expresó.

 Finalmente, Arum señaló la calidad de Bradley en el ring y afirmó que es un rival de cuidado, pero no se compara con otros púgiles que haya enfrentado anteriormente el filipino.

«(Tim) Bradley es un peleador de grandes cualidades, pero no es un boxeador del tipo al que Manny no haya enfrentado antes», explicó.

 La contienda entre Pacquiao y Bradley también será promocionada durante los encuentros de Playoffs de la NBA en las próximas semanas. Pacquiao insistió en que hoy es un hombre totalmente religioso y que eso ha dado un giro positivo a su vida.