La historia de la República Bolivariana de Venezuela conoce como el Pacto de Punto Fijo el concertado el 31-10-1958 entre los partidos Acción Democrática, COPEI y URD, luego de deponer al dictador general Marcos Pérez Jiménez, derrocado el 23-1-58 por un movimiento cívico-militar que encabezó el coronel Hugo Trejo.

Por AD firmaron Rómulo Betancourt y Gonzalo Barrios; por URD Jóvito Villalba, Ignacio Luis Arcaya y Manuel López Rivas, y por COPEI firmaron Rafael Caldera, Pedro del Corral y Lorenzo Fernández.

El Pacto de Punto Fijo se extendió por 41 años, hasta que el 2-2-1999, el contestatario coronel Hugo Chávez Frías ganó las elecciones de ese año, imponiendo un nuevo estilo de dictadura afincada en el populismo de subsidios, cuando la estrategia correcta es invertir con prudencia y eficiencia los recursos petroleros creando industrias, considerando que Venezuela dispone de las reservas de crudo mayores del mundo estimadas en 297 mil millones de barriles, seguido por Rusia con más de 200 mil millones de barriles e Irán con 138 mil millones de barriles.

Los adalides de Punto Fijo, mejor conocido como La Conchupancia, demostraron al final un prontuario de corrupción que el acuerdo formalizó la impunidad, que precipitó su expulsión del escenario político venezolano, sustituido por otra versión peor que sigue dilapidando los recursos petroleros por un populismo barato que postra a Venezuela.

Los coroneles son los activos conductores de las sociedades, en Venezuela Hugo Trejo y Hugo Chávez, en Egipto, Mohamed Naguib Bey y Gamal Andel Nasser, en Lybia, Muammar El Gadaffy, en Argelia. Mohamed Ben Bela, en Turquía, Kemal Ataturk; en Irán, Abdel Karim Kassen, en RD, Francis Caamaño, Rafael Fernández Domínguez y Rafael Hernando Ramírez, y la interrogante de un cuarto coronel que culmine con la Conchupancia PLD-PRD. Algún día.