No es buen augurio para ningún club cuando el tema central de discusión gira en torno a la posibilidad de que su estrella de cartel tenga los días contados.
Tal es la situación de los Padres de San Diego y Adrián González, el primera base que desde ya se menciona como la ficha más apetecida a la hora de los cambios antes de la fecha límite, el 31 de julio
Al pelotero mexicano, quien viene de una campaña en la que bateó 40 jonrones y produjo 99 carreras, aún le quedan un par de años bajo la cobija de los Padres.
Ese pacto es considerado como un negocio redondo para los Padres, quienes en 2007 lograron contratarle por unos módicos 9,5 millones por cuatro años. San Diego tiene derecho a ejercer una opción de 5,5 millones para 2011.
La expectativa está en que si el equipo queda descolgado de la lucha por el banderín en el Oeste de la Liga Nacional, pues se tratará de ofrecerlo al mejor postor.
No es nada que sorprenda, puesto que su nombre ya ha sonado como parte de canjes con los Medias Rojas de Boston y los Marineros de Seattle durante el último año.
Si bien tiene sus raíces en San Diego, González sabe que el béisbol es un negocio y de hecho acaba de decir que su prioridad en su próximo contrato es un jugoso monto.
«Este contrato será el que buscaré lo que merezco», afirmó González al iniciar la pretemporada. «Mi agente se encargará de las negociaciones, pero cuando hable con mi agente la cuestión central será sobre la valía».
Y González saldrá bastante caro. Aparte de ser un excelente fildeador en su posición, con un par de Guantes de Oro que lo convalidan, para nadie escapa el factor que ha conectado 130 jonrones en las últimas cuatro temporadas como parte de un club cuyo estadio Petco Park tiene dimensiones que no favorecen a los bateadores de poder.
Por lo pronto, los Padres intentarán sacarle el mayor provecho de tenerlo en su alineación. San Diego cerró con marca de 75-87 la pasada campaña, en el penúltimo lugar de su división, pero registró foja de 37-25 en los últimos dos meses.
Es un equipo que podría causar estragos si el abridor Chris Young se mantiene sano y varias promesas se consolidan como el tercera base Chase Headley.
El pitcheo
Aún cuando ya no tengan a Jake Peavy, los Padres cuentan con una decorosa rotación abridora y su bullpen puede considerársele como el mejor en su división.
Y no hay que olvidar que su manager Bud Black tiene buen ojo con los lanzadores, ya que previamente fue coach de pitcheo con los Angelinos de Los Angeles.
Young ha tenido mala suerte con las lesiones al frenarle la buena proyección que tenía en 2006 cuando acumuló marca de 11-5. Su última lesión fue una dolencia en el hombro que acabó su temporada a mediados de junio y tuvo que pasar por el quirófano.
Otros dos brazos que conceden garantías son los de Kevin Correia (12-11, 3.91) y Jon Garland (11-13, 4.01), éste último un agente libre. También está Clayton Richard (9-5, 4.41), quien llegó procedente de los Medias Blancas de Chicago en el canje por Peavy el año pasado.
El hombre para la quinta plaza debe ser el prospecto Mat Latos, quien lanzó bien el año pasado (4-5, 4.62 en 10 salidas en 2009).
Jugadores clave
primera base
Adrián González
El toletero conectó 40 cuadrangulares y remolcó exactamente 99 carreras la pasada temporada, pero el problema principal de San Diego es que no se sabe cuánto tiempo podrá mantener en la novena, pues su precio es demasiado elevado.
cerrador
Heath Bell
El sustituto de Trevor Hoffman no ha decepcionado, como quedó evidenciado la pasada campaña cuando el hombre rescató 42 partidos en 48 oportunidades además de registrar una efectividad de 2.71 en el proceso de la temporada para el conjunto de los Padres de San Diego.
primer bate
Tony Gwynn Jr.
Se espera que el hijo del mejor pelotero en haber jugado en la franquicia pueda comenzar a producir consistentemente con los Padres esta temporada. El año pasado jugó 119 partidos y tuvo una actuación modesta en la División Oeste de la Liga Nacional.
primer abridor
Chris Young
El año pasado se vio limitado a una marca pésima de 4-6 y 5.21, pero la realidad es que sólo realizó 14 aperturas por problemas de lesión. Se espera que sea el primer abridor de los Padres cuando se inicie la temporada y de ahí la creencia de que tenga una buena presentación.