Angela Cullen

Cuando el capitán alemán Philipp Lahm alzó el trofeo de la Copa del Mundo en el estadio Maracaná de Río de Janeiro por un histórico cuarto título de campeonato, él y sus compañeros de equipo eran 300.000 euros (US$408.000) más ricos.

La recompensa de la asociación de fútbol DFB de Alemania por llevar el premio a Berlín es un pequeño precio si se la compara con el estímulo que podría recibir la economía alemana en tanto la victoria atrae a los consumidores a la marca “Made in Germany”, dice el instituto de investigación Prognos AG.

“Made in Germany decididamente crece en valor con el éxito”, declaró en entrevista Christian Boellhoff, director gerente de Prognos en Berlín. “Tiene una influencia fortalecedora en las exportaciones alemanas”.

Alemania, la economía más grande de Europa, es el tercer exportador del mundo, detrás de China y los Estados Unidos. Las remesas de automóviles Mercedes-Benz, los artículos deportivos de Adidas AG y la tecnología de centrales de Siemens AG impulsaron la venta de bienes y servicios alemanes, de acuerdo con los datos que suministró la Oficina Federal de Estadísticas.

Adidas, como sponsor oficial de Alemania y su contendiente Argentina, llegó al duelo del domingo con ventaja al ser “la marca más visible” en la final, dijo el máximo responsable ejecutivo Herbert Hainer en una declaración emitida la semana pasada.

Adidas subió 2,4 por ciento, el salto intradía más marcado desde el 26 de marzo, y se negoció con un alza de 2,1 por ciento a 73 euros a las 9:26 en Fráncfort.

El Índice de referencia DAX de Alemania trepó 0,5 por ciento a 9.714,83.

‘Efecto positivo’. El partido terminó 1 a 0 a favor de Alemania, coronando el reinado de ocho años de Joachim Loew como director técnico de la selección. El suplente Mario Goetze anotó el gol en el minuto 113, lo que permitió a los alemanes evitar una definición por penales.

“Psicológicamente, tiene un efecto positivo en la confianza en nosotros mismos”, señaló Boellhoff. “Aunque no se puede calcular esto en detalle, puede tener una influencia positiva en la motivación laboral y la confianza en producir calidad”.

Las victorias en las Copas del Mundo coincidieron con períodos de prosperidad económica en Alemania en el pasado. La derrota de Hungría en 1954 en Berna marcó el comienzo de la recuperación política y económica de posguerra del país, levantando la moral de una nación derrotada.

En 1974, la medalla del ganador llegó en los albores de otro resurgimiento económico, y el año anterior Alemania se había convertido en una de las naciones fundadoras del Grupo de los Seis países industrializados, que luego se amplió para incorporar a Canadá y Rusia.

La final de 1990 en Roma, también frente a Argentina, tuvo lugar ocho meses después de la caída del Muro de Berlín.

El triunfo del domingo es el primero de una Alemania unida. Ningún país llegó a más finales de la Copa del Mundo -ocho- aunque Brasil posee el récord de títulos, con cinco frente a los cuatro de Alemania.

“Googléalo” se convierte en “ocúltalo” tras el fallo de la UE

Aoife White y Angeline Benoit

“Googléalo” es sinónimo de buscar información. Ahora Google Inc. batalla con una nueva norma: “Ocúltalo”.

La compañía del motor de búsqueda más grande del mundo está tratando de ver cómo aplicar el fallo de un tribunal de la Unión Europea que establece que los ciudadanos tienen derecho a ser olvidados, por así decirlo, cuando las búsquedas en Internet arrojan resultados que son “inadecuados, irrelevantes, ya no vigentes o excesivos”.

La empresa recibió críticas de todas partes por su respuesta. Dio un giro de 180° al restaurar los enlaces a notas de los diarios The Daily Telegraph y The Guardian en el Reino Unido después de ser atacada por hacer el papel de censora de prensa. Entretanto, el ente de control de temas de privacidad del país dijo que han empezado a llegar quejas de ciudadanos que quieren que se bloquee información.

“Google no quiere hacerlo, peleó contra ello”, dijo Danny O’Sullivan, editor fundador del sitio web SearchEngineLand.com. “No creo que estén capacitados para tomar esas decisiones y no tenían que hacerlo. Podrían haberse opuesto no accediendo a todos los pedidos” de retirar resultados de búsqueda.

Aun cuando Google colgó una herramienta online para gestionar miles de solicitudes de remoción y está bloqueando los resultados de las búsquedas de nombres de personas, incluidas las noticias y los blogs, no está claro a partir del fallo en qué medida se debe esperar que Google censure Internet.

Bloqueo excesivo. El giro de Google en el Reino Unido se produjo después de que informara a los diarios que había eliminado los enlaces a ciertos artículos, incluidos los resultados de búsquedas sobre Dougie McDonald, un árbitro de fútbol escocés, que dirigían a artículos de 2010 sobre la vez que este mintió al decir por qué había concedido un tiro penal.

La compañía podría estar bloqueando en forma excesiva los resultados de búsquedas al eliminar artículos periodísticos recientes sobre temas de interés público que “claramente no encajan en los términos del fallo judicial”, dijo Paul Bernal, profesor de derecho de la Universidad de East Anglia. “¿Por qué reaccionan exageradamente? Porque quieren poder decir que tenían razón desde un principio: esto no es factible y es censura”.

Google ha presentado argumentos contra las propuestas de la UE que podrían exigirle borrar información sobre personas durante años. Uno de sus abogados comparó las búsquedas con el servicio de correo, al que no se puede responsabilizar por las cartas que distribuye, según el comentario publicado en un blog en 2012.

El Tribunal de Justicia de la UE disintió el 13 de mayo cuando apoyó al ente regulador de protección de datos de España, que había ordenado a Google eliminar el enlace a un aviso de diario que aparecía en las búsquedas sobre Mario Costeja González, un hombre cuya casa se había vendido para saldar deuda.

Google de Mountain View, California, está cumpliendo con el fallo de la UE y abordando “un proceso que es nuevo para nosotros y está en evolución”, según una declaración enviada por correo electrónico. “Seguiremos escuchando las respuestas que recibimos y también vamos a trabajar con las autoridades de protección de datos y otros”.