Hoy 
POR MANASES SEPULVEDA
El país corre el riesgo de quedar «totalmente seco» de gasoil y gasolina, lo que podría reflejarse desde hoy en una parálisis del parque vehicular, dijo ayer el presidente de la Asociación Nacional de Detallistas de Gasolina (ANADEGAS).
En tanto, ayer, la escasez del Gas Licuado de Petróleo (GLP) tuvo niveles dramáticos con largas filas y gran parte de las envasadoras cerradas.
Juan Ignacio Espaillat, presidente de ANADEGAS, dijo que en lugares como Neiba y Montecristi se agotaron el gasoil y la gasolina y que las filas eran interminables.
Expresó que el consejo directivo de ANADEGAS emplazó a las empresas distribuidoras Texaco, Esso, Isla, Coastal y Nativa, a importar combustible de manera independiente al que la Shell importa, dada la incapacidad de esta última en suplir la demanda nacional.
También solicitó a las distribuidoras hacer importaciones ajustadas a la ley 112, al tiempo que recomendó traer combustibles de Trinidad Tobago, Martinica, Curazao, Venezuela y el Golfo de México, para acortar el tiempo de arribo del combustible.
Ante la situación, la Refinería de Petróleo (RIFIDOMSA) anunció para hoy la llegada del buque tanque Brali, con 1,890,000 galones de gasolina regular, 840,000 galones de gasolina premium, 1,932,000 galones de Jet Al y 4,620,000 galones de gasoil.
GLP
Mientras tanto, el abastecimiento del GLP llegó a niveles críticos en la mañana y la tarde de ayer, cuando la mayoría de las envasadoras del carburante no tenían en existencia.
La situación provocaba quejas y molestias en los usuarios que hicieron largas filas como en la envasadora Propagás del sector Evaristo Morales, donde los vehículos daban la vuelta a la esquina, en turno, así como personas con sus tanques para abastecerse.
«Yo anduve por seis bombas, tanto de aquí como de aquel lado y pude encontrar aquí», dijo Julio Fernández, en esa estación.
Néstor Rijo expresó que tuvo que hacer turno desde las 6:00 de la mañana para poder abastecerse.
En tanto, Miguel Abreu salió desde Sabana Perdida buscando gas, pero sus posibilidades eran remotas, ya que estaba a una distancia de 300 tanques en fila.
Entre las envasadoras que no disponían de carburante estaba la del kilómetro 12, Halvagas de las avenida Independencia, Tropigás del kilómetro 12 de la autopista 30 de Mayo y Vallejo Gas de la Isabel Aguiar.
Asimismo, en Propagás del kilómetro 10 de la autopista Duarte, en Los Peralejos, del kilómetro 13 de la autopista Duarte, en Hidalgo Gas, de los Alcarrizos y en Solgas de Los Ríos.
