País será certificado por la Unión Europea

País será certificado por la Unión Europea

POR CLAUDIO CABRERA
El creciente sitial que ha ganando el país dentro del grupo de naciones exportadoras de productos orgánicos ha impresionado de tal forma a los consumidores europeos que la Unión Europea decidió enviar al país una experta que evalúa la calidad de los controles en el procesamiento de la agricultura orgánica, a fin de que el país sea admitido en calidad de tercer proveedor de estos rubros a esa región.

La ingeniera Susanne Moller Andersen vino al país con fines de efectuar una misión que durará cuatro semanas, ya que el país ha pasado a ser considerado como uno de los que cuenta con mayores potenciales para adentrarse a los mercados europeos en lo inmediato, lo cual ha estado realizando a través de exportaciones de nueve renglones, incluyendo azúcar orgánica.

Estas exportaciones, a las que se añaden rubros como el banano (guineos), cacao, café, mango, aguacates, limón, coco, papaya y otros que cuentan con gran vocación de mercados en el extranjero.

Habida cuenta de que el mercado de exportaciones de estos productos cerró el año 2005 con ventas por encima de los US$160.0 millones, los agroproductores asociados alrededor de estos renglones estiman que la producción para el futuro inmediato, probablemente al finalizar el 2006 podría, sobrepasar los US$200.0 millones.

¿A qué se debe este “boom” de la producción agrícola orgánica? La respuesta la podemos encontrar en los recientes problemas confrontados por la producción acelerada de productos de origen animal y vegetal que para el consumo han ido acelerando científicos y técnicos en los países desarrollados de todo el mundo, donde se ha originado un mercado productivo semiartificial, con manipulación genética y utilizando agentes químicos pre-elaborados, los cuales han efectado la salud de los consumidores en todo el mundo.

A esta realidad no han escapado países en vías de desarrollo, pero la pronta actitud de autocrítica, medida por los fatales resultados en el medio ambiente y en enfermedades que afectan a productores y consumdores pusieron una alerta sobre el asunto, hasta lograr una significativa reducción de estos productos.

Es así como la ingeniera Susanne Moller Andersen, consultora del Programa de Iniciativas y Pesticidas (PIP, por sus siglas en inglés) de la Unión Europea, señala al evaluar el problema que las experiencias acumuladas sobre los daños al mediao ambiente y enfermedades producidas por productos elaborados con base no orgánica, ha impulsado estos proyectos y el interés por incentivar estos cultivos a nivel mundial.

La experta ha trabajado en Perú con los campesinos para la producción y exportación de quina orgánica, así como ha trabajado en países de Europa del Este, para efectuar programas similares con impacto en el desarrollo rural, “para implementar un sistema de control de uso y aplicación de pesticidas en esos países”.

Refirió que los países bálticos, Polonia, Turquía y otros, confrontaban, en forma creciente, estos problemas, que igualmente se han presentado en países latinoamericanos en los que el peso de la producción agrícola es de suma importancia. En Nepal ha efectuado un curso de capacitación para inspectores en esta área con mucho éxito para la producción de rubros.

Refiere que estos programas han logrado resultados sorprendentes al contribuir a cambiar la mentalidad del agricultor tradicional hacia una mejor idea de que debe convivir con el medio ambiente.

“Al organizarse los productores -ha mejorado las condiciones de vida de estos pequeños productores-, que para mi es considerado muy importante, ya que ese sistema también incluye programas de capacitación de productores”. 

En la actualidad, la Unión Europea se está interesando vivamente en dar incentivos para que se adentren a este mercado productos que reúnan las condiciones previas o requisitos que determinan la calidad de un producto orgánico de origen agrícola.

Destacó la conciencia que han desarrollado los consumidores europeos, quiene exigen al comprar que los productos orgánicos estén debidamente certificados.

Resalta que ahora, al consumirse un producto, los consumidores se informan incluso de cuál comunidad proviene, bajo cuáles condiciones se elabora, así como toda la historia de ese producto.

Apoyados por los 15

El proyecto cuenta con apoyo de la Unión Europea, mediante la donación de 112 mil euros destinados al proceso de previa certificación, los cuales fueron destinados a apoyar el programa del PIP que se ha concretado en una consultoría en el país.

Según lo explica el director de la oficina local del Instituto Interamericano de Cooperación Agrícola (IICA), agrónomo Rafael J. Marte, organismo adscrito a la Organización de Estados Americanos (OEA), la experta vino al país a revisar “toda la documentación, y lo que se ha hecho hasta ahora en materia institucional, como una pre-auditoría, hasta llegar a una auditoría legal que desea efectuar la Unión Europea para que nosotros podamos pasar al listado de País Tercero”.

Acorde a la consultora danesa los consumidores europeos han confrontado ya bastante problemas relacionados con el medio ambiente en la propia agricultura europea, por lo cual ha emergido este programa de incentivo a la agricultura orgánica en los países de esa región y en países de ultramar.

“Durante los años 70 se presentaron en Europa bastante problemas vinculados a las enfermedades, sobre todo en la producción pecuaria”.

La ingeniera Moller afirma que ahora existe una conciencia entre los consumidores europeos “de que se debe preferir el consumo de productos orgánicos, sobre todo para evitar problemas con el medio ambiente y, en segundo lugar, con las enfermedades humanas”.

Citó el caso de otros países latinoamericanos que están dedicando cada vez más tierras cultivables a la producción orgánica, al igual que Costa Rica, los cuales incluso han adquirido la categoría de “países terceros”, lo que les da acceso preferencial al mercado de ese continente.

En este caso, dijo, la República Dominicana sería el tercer país que, una vez sobrepasada la evaluación, logra dicha categoría dentro del marco de las naciones de América Latina y el Caribe.

La consultora trabaja en el estudio conjuntamente con el agrónomo Juan Arthur, director del Programa Nacional de Agricultura Orgánica de la Secretaría de Agricultura (SEA), junto al subsecretarío de Planificación de esa cartera, Rafael Rodríguez y a Pilar Ramírez, consultor especializado del IICA. 

Publicaciones Relacionadas

Más leídas