El fusionar y eliminar instituciones que pueden hacer el mismo trabajo, con mucho menos gente y espacio, tendrá como resultados más ahorros, ya que serán menores los gastos y quedará más dinero disponible del presupuesto que se podría destinar en el gasto social.

Así lo señaló el economistas José Luis De Ramón al hablar sobre la decisión, del próximo gobierno de Luis Abinader, de eliminar la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe), la reorganización de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) fusionar el Consejo Estatal del Azúcar (CEA).

“Aplaudimos todas las decisiones que signifique la reducción de un estado grande. Es importante avanzar y reducir toda la burocracia que tiene el Estado dominicano”, señaló.
El economista señaló que el Gobierno debe ir a la eficiencia máxima de sus instituciones y que si se requiere legislaciones adicionales, que complementen las leyes actuales, debe procurar que el Congreso apruebe las leyes necesarias.
“Que se permita disminuir el tamaño del Estado y que se eliminen las trabas burocráticas para las empresas y los ciudadanos”, dijo.

Explicó que cuando se produce una reorganización del Estado, tendiente a lograr eficiencia, es muy probable que se produzcan pérdidas de empleo. Sin embargo, la liberación de recursos que esta acción significa, puede financiar la creación de otros puestos de trabajo.