La cooperación internacional no tiene que verse afectada por la crisis económica mundial aunque no incremente los montos, porque puede variar a intercambios de experiencias técnicas, investigación para avanzar al desarrollo, afirmó José María Vera, director de Planificación  para la Cooperación de la Secretaría General Iberoamericana.

En igual sentido se pronunciaron  Patricia González, Gerente para la Cooperación Sur Sur Iberoamericana, y América Bastidas, viceministra de Cooperación Internacional del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo de República Dominicana, para quienes la cooperación ha pasado de ser vertical a una colaboración entre países socios.

Los expertos fueron entrevistados en el programa televisivo “Propuesta Matinal” por los periodistas Manuel Jiménez y Ángel Barriuso, en el canal 45.

Para Vera, hay riesgos de que pueda caer la cooperación por la crisis en Estados Unidos y la Unión Europea, pero en los últimos cinco años ha habido fuertes incrementos.

“De 55,000 millones de dólares al año se pasó a 120,000 millones en los últimos dos. En el caso de América Latina se había quedado estancada en el entorno de los 5,000 millones aproximadamente, pero había algunos países que sí había crecido, entre ellos España, que había subido de los 600 millones a los 1,000 y ahí se mantienen”, expresó Vera.

Aseguró que aunque hay países que están en una crisis fuerte, “mantienen sus compromisos para cooperar de una forma solidaria con otros países y con América Latina también que ha sido más olvidada por parte de algunos otros donantes”.

Admitió que en los próximos años habrá “alguna restricción y que seguramente afectará, pero con toda seguridad se va a mantener ese interés y esas ganas”.

Vera dijo que hace años había condiciones de tipo comerciales, de estabilidad macroeconómica que entraban un poco en la soberanía de los países, pero “hoy las condiciones son más dialogadas, ya se habla más de países socios, en los cuales se hacen planes país, planes sectoriales”.

Asimismo, señaló que hace falta ver qué resultados son los que se van a tener en términos de los logros que se consiguen en reducción de pobreza o de desarrollo.

Aclaró que el problema no es dejar de cooperar con países que son de renta media, sino “variar la cooperación porque hay unas necesidades que son distintas. Que pueden ir más a un fortalecimiento de las políticas públicas, a una mayor línea de investigación, ciencia e intercambio de conocimientos: áreas que no son de tantos recursos, como de compartir experiencias para avanzar juntos hacia el desarrollo”.

Apuntó que ya la cooperación ahora tiene un concepto “de ayuda programática”,  para dejar atrás los proyectos de cooperación aislados para dar paso a la canalización de recursos sectoriales como para educación, lucha contra la pobreza, al sector sanitario, de una forma que conecte directamente hacia una política pública.

Cooperación triangular

Para Patricia González, es un hecho que muchos de los donantes tradicionales como los países nórdicos, España y la Unión Europea, califican de alguna manera a los países latinoamericanos en una condición de renta media y por tanto “no somos elegibles para la cooperación financiera no reembolsable”, pero eso no anula toda cooperación.

“Eso no significa que los países (de renta media) no tengamos la posibilidad de acceder a los programas de asistencia técnica o a transferencia de experiencias”, dijo González, porque donde disminuyen los recursos financieros de carácter fresco se abren posibilidades de buscar cuáles son las deficiencias y necesidades y trabajar para superar esas carencias.

Ya no se trata de una cooperación vertical, “en este escenario de la cooperación Sur Sur y la cooperación triangular, son tres conversando, poniéndose de acuerdo para cumplir un objetivo en conjunto” que implica cierta responsabilidad social por cada una de las partes.

La experta de la Secretaría General Iberoamericana afirmó que el valor agregado que tiene la cooperación hoy es que “más que la cantidad de plata, de recursos que tiene cada uno, es que aporto yo para generar un determinado efecto en la vida de las personas de un determinado país”.

Cooperación con Haití

Tras asegurar que ya República Dominicana no es un país prioritario para la cooperación no reembolsable, América Bastidas, viceministra de Cooperación del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, sostuvo que hay donantes que están continuando las cooperaciones siempre que se profundicen y anticipen tanto inversión como comercio.

“Seguimos teniendo grandes donantes, como los fondos Cotonou de la Unión Europea. La Unión Europea, como un organismo multilateral, es muy importante, y como cooperación bilateral para España somos un país muy importante e incluso, independientemente del criterio, seguimos siendo prioridad para España”, apuntó Bastidas.

Consideró que no hay país, por pequeño que sea, que no tenga alguna experiencia que pueda traspasar a otros como cooperación.

Bastidas, quien junto a Vera y González encabezan un seminario sobre cooperación triangular que se desarrolla en el país, examinando experiencias y explorando nuevas posibilidades de colaboración en el marco Sur Sur.

Dijo que se trata de ver cómo un país que tradicionalmente era donante, con otro país de mayor desarrollo relativo en América Latina, pueden acudir juntos a asistir a un tercer país en condición de socios.

Para Bastidas, República Dominicana tiene “mucha experiencia de cooperación alemana, que estamos triangulando con México; tenemos Japón-República Dominicana y Haití;  y desde la República Dominicana se está “pidiendo a todos los donantes que triangulemos con Haití”.

En este aspecto Vera señaló que “hay unos 20 proyectos de cooperación iberoamericana con Haití en diversos ámbitos y estamos planteándolo hacer vía República Dominicana, como país iberoamericano que es y socio principal para Haití”.

El director de Planificación de la Secretaría General Iberoamericana dijo que quizás Haití es el país donde se está dando una cooperación Sur Sur desde América Latina mayor y donde se están estableciendo muchos esquemas de este tipo triangular”.

De su lado, Bastidas informó que en el seminario se expone un programa de cooperación de Japón con Haití mediante la capacitación, a través del Instituto Superior de Agricultura (ISA), de técnicos para la agricultura de montañas.

“Eso ha implicado diálogos entre las autoridades de Agricultura de Haití, República Dominicana y Japón, que es un dato que nosotros tenemos que poner relevante en la cooperación”, expresó la funcionaria dominicana.

Agregó que están apostando “al desarrollo de capacidades humanas e institucionales que generen en cada uno de los países la suficiente solvencia técnica para seguir adelante”.

Consideró que con la donación de una universidad a Haití por parte de la República Dominicana, “se construye la mejor plataforma para formar recursos humanos e institucionales en Haití”.

Además, informó que con España “estamos discutiendo un mercado en la zona fronteriza, que tiene que favorecer el comercio con Haití”.