FRANCISCO ALVAREZ CASTELLANOS
Hay “movimientos” en la política dominicana que yo, ¡palabra de honor!, no he llegado a entender. Y el ejemplo clásico que esgrimo es el apoyo irrestricto que el PRD le está dando al PRSC, en lo que concierne a la secretaría general de la Liga Municipal Dominicana.

Durante los últimos ocho años el PRD ha apoyado a Amable Aristy Castro para ese cargo. Aristy Castro es directivo del PRSC. Y ahora vuelve el PRD a apoyar al mismo hombre para otros cuatro años.

Bien, el caso es que Aristy Castro no solo ha aspirado durante todo ese tiempo a la secretaría general de la LMD, entidad que maneja miles de millones de pesos al año…y un “paquete” de síndicos que hasta se han “sindicalizado” para apoyar al dirigente higüeyano, sino que ha hecho públicas sus aspiraciones para ser Presidente de la República en el 2008.

Entonces el PRD se verá en una disyuntiva tremenda: quitar el apoyo que ha dado a Aristy Castro en la LMD, durante muchos años, en lugar de apoyar a un dirigente perredeísta, y tratar de volver a ocupar un lugar al que tiene perfecto derecho pero que, gracias a una política absurda, se le ha puesto hoy más lejos que nunca.

El colmo ha sido que hasta el posible candidato a la Presidencia por el PRD, Miguel Vargas Maldonado, ha apoyado a quien podría ser su adversario más poderoso en el 2008. O se está contribuyendo a que Aristy Castro haga sus consabidos “amarres”, mientras sus posibles contendores lo apoyan en esas gestiones. Aristy Castro, cuyos orígenes no pueden ser más humildes y más pobres, se ha convertido en un líder de tal magnitud, que no se sabe “si Amable es de Higüey o Higüey es de Amable”.

La actuación de Vargas Maldonado no puede ser más desacertada. Yo conocí uno de sus principales ancestros, de quien fuí amigo y al que le debe en gran parte su situación económica. Vargas Maldonado es uno de los hombres más ricos de este país. Recuerden que vendió el antiguo edificio de la CODETEL a la Dirección de Aduanas por…¡RD$1,000,000,000!. ¡Mil millones de pesos, que no son “jícara de coco”, como diría Altagracia Salazar.

Y ha hecho múltiples negocios que han cuadruplicado su fortuna. Uno de ellos fue la compra, primero, y después la venta del hotel Hispaniola a un consorcio español. Y dejemos los recuerdos.

El caso es que Vargas Maldonado no debió jamás apoyar la candidatura de Aristy Castro, sabiendo que es muy posible que lo tenga como adversario en el 2008.

Y el PRD entrega mansamente una institución que, como hace su actual incumbente, le hubiera permitido hacer “amarres” importantes con vistas al 2008.

Viendo todo eso, y mucho más que me dejé “en el tintero”, ¡palabra de honor, que no entiendo nada!