El Gobierno respondió ayer acusaciones del expresidente Hipólito Mejía, candidato presidencial perredeísta, descalificándolo para hablar de corrupción y recordarle los escándalos en su gestión 2000-2004, en la que le cabe la gloria de haber quebrado no solo tres bancos privados sino también el Banco Central. César Pina Toribio, ministro de la Presidencia, y Temístocles Montás, ministro de Economía y Planificación, dijeron que con esas declaraciones, Mejía irrespeta y desconsidera a la opinión pública.
El Gobierno arremetió ayer contra el expresidente Hipólito Mejía, candidato presidencial perredeísta, al descalificarlo para hablar de corrupción y recordarle los escándalos de esa índole en su gestión 2000-2004, en la que le cabe la gloria de haber quebrado no solo tres bancos privados sino también el Banco Central.
De esta manera, responde a las declaraciones de Mejía en la Cámara Americana de Comercio.
César Pina Toribio, ministro de la Presidencia, y Temístocles Montás, ministro de Economía, Planificación, dijeron que con esas declaraciones, Mejía irrespeta y desconsidera a la opinión pública y evidencia que mantiene la práctica de mentir a la sociedad.
Afirmaron que Mejía olvida que los escándalos de corrupción en su Gobierno fueron permanentes.
Recordaron los funcionarios que la casi totalidad de las personas denunciadas e involucradas en dichos escándalos son los que actualmente le acompañan en sus aspiraciones públicas y los escándalos asociados al uso de la tarjeta de crédito de Baninter, por parte de uno de sus colaboradores más cercanos, así como también el asalto que significó el Plan Renove por parte de muchos de sus allegados
Afirmaron que Mejía no era ajeno a los escándalos, ya que de acuerdo con su propia declaración jurada de bienes, su fortuna se habría incrementado en un 144 por ciento al final de su mandato.
Pina Toribio y Montás también pidieron a la población no olvidar que cuando la justicia actuó en algunos casos, Mejía fue defensor descarado de los involucrados y profería declaraciones amenazantes e injuriosas contra las autoridades judiciales.
Aseguran que el expresidente Mejía pretende engañar a los dominicanos cuando oculta que a diferencia de su mandato, ha sido en esta gestión cuando se ha creado la mayor normativa para combatir la corrupción y la impunidad.
Alegaron que la impericia fue la nota dominante de la gestión de Mejía, porque, como muy bien lo señaló Hatuey De Camps, el país le quedó grande a Hipólito Mejía.