NUEVA YORK.-El embajador dominicano en los Estados Unidos, Roberto Saladín, la dirigente perredeista Peggy Cabral viuda Peña Gómez, y el izquierdista Radhames Pérez  destacaron la importancia de que los dominicanos se mantengan unidos, enarbolen su patriotismo y continúen prosperando en la educación y otros aspectos en los Estados Unidos.

Saladín, Cabral viuda Peña Gómez y Pérez, coordinador de Alianza País en EEUU, expusieron en un taller sobre “El congresista dominicano de ultramar” efectuado en el marco de la XI Conferencia para Asuntos Dominicanos de Nueva Jersey, realizada en la Rutgers School of Law – Center for Law & Justice, localizada en el 123 de la calle Washington en Newark, Nueva Jersey.

Aunque con diferencias político-partidarias, los tres coincidieron en favorecer a la diáspora dominicana resaltando sus aportes a la economía de su país tanto a través de las remesas enviadas anualmente (más de 3,500 millones de dólares) como de las inversiones.

El embajador Saladín afirmo que la Ley de congresista en el exterior ha sido un ejercicio de la democracia y fue producto de la concertación porque todos los partidos políticos se pusieron de acuerdo en esa dirección.

Destaco la participación del presidente Leonel Fernández en los avances que ha tenido la democracia en la nación dominicana en los últimos anos y su esfuerzo para que los dominicanos residentes en el exterior tengan representación en el Congreso Nacional a partir de las elecciones presidenciales de 2012, y lograr un desarrollo integral del país, abriendo nuevos mercados y fortaleciendo la economía.

En la exposición participaron, además, Ramón Santana, miembro del Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) con asiento en Nueva York, y un dirigente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).

En tanto, Peggy Cabral viuda Peña Gómez dijo que el líder perredeista doctor José Francisco Pena Gómez ha sido el político dominicano que mas se ha preocupado por el dominicano residente no solo en los Estados Unidos, sino en todos los países del mundo y gracias a su esmerada dedicación a la política y al servicio de la colectividad la diáspora dominicana pudo lograr el voto de la doble ciudadanía y el voto desde el extranjero.

Recordó que tantas aspiraciones tenia Peña Gómez para la comunidad dominicana en el exterior, que en 1994, después del fraude electoral, que le hicieron al Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y en las negociaciones con el entonces presidente Joaquín Balaguer, incluyo como puntos de reforma a la Constitución: la doble nacionalidad, el voto del dominicano en el exterior y la representación congresual de ultramar.

“La doble nacionalidad permitió que los dominicanos alcanzaran hacerse nacionales en los países de residencia, sin perder su amada dominicanidad; el voto en el exterior elevo la destreza de los dominicanos y dominicanas en las seccionales, ya que juegan un importante papel con los partidos y sus candidatos, además de que ocupan una región electoral, como parte de la territorialidad”, enfatizo.

Los dominicanos residentes en el exterior ascienden a más de dos millones. El 65% en Estados Unidos, Puerto Rico y Canadá, mientras el resto el 35% en Europa y otros países y la diáspora dominicana genera ingresos que superan los 50 mil millones de dólares en los Estados Unidos, según dijo Cabral viuda Pena Gómez.

Resalto Peggy que actualmente hay tres alcaldes dominicanos en ciudades mayoritarias como Lawrence, Massachussets; Providence, Rhode Island; y Passaic, Nueva Jersey, e igualmente contamos con representación local en los gobiernos municipales y estatales, siendo un caso evidente la ciudad de Nueva York donde hay dos senadores estatales, un asambleísta y tres concejales.

Asimismo destaco que hay representación electa en cada uno de los condados, además de la importante presencia en la Administración Federal de figuras como Thomas Pérez, asistente del Fiscal General de los Estados Unidos, y Julissa Reynoso, subsecretaria del Departamento de Estado y Encargada de Centro América y el Caribe.

Por la diáspora

La secretaria de relaciones internacionales del PRD dijo que esa organización tiene como agenda que los dominicanos que ostenten la doble nacionalidad puedan retirarse a su patria y recibir atenciones medicas locales, insertar la diáspora en el complejo productivo, exenciones de impuestos para quienes inviertan en nuevas empresas, e incentivar con la construcción de proyectos habitacionales a los dominicanos que anhelan el retorno y contara con un apartamento, una casa, a donde poder regresar.

Asimismo, todo, en el marco de leyes y reglas claras, crear incentivos para quienes se suscriban a estos proyectos; la creación de un banco de talentos dominicanos, a fin de facilitar la transferencia tecnológica e incentivar a que los cerebros dominicanos transporte sus conocimientos a nuestro país.

Añadió Cabral de Pena Gómez que los representantes consulares deben y tienen que ser verdaderos protectores de los dominicanos en el exterior, y el PRD se propone, además, fomentar las casas de la cultura dominicana, donde sean exaltados y trasmitidos los valores dominicanos a las nuevas generaciones.

Diputaciones no muy acogidas

El coordinador del Partido Alianza País en los Estados Unidos, Radhames Pérez, dijo por su parte que aaunque con aceptación entre los militantes y dirigentes políticos partidarios, la ley que garantiza la elección de diputados y diputadas de ultramar no es popular en una creciente franja de ciudadanos dominicanos emigrados.

“Muchos no logran captar la utilidad que tiene para las comunidades en el exterior la mencionada ley y consideran que es una forma mas de malgastar una parte del erario publico, dinero que entienden debería de ser usado para saldar, aun sea parcialmente, la deuda social históricamente acumulada por una democracia sin rostro humano como la dominicana”, dijo.

Añadió que teniendo como referencia el mal desempeño y los múltiples y frecuentes casos de corrupción en que se han visto envueltos congresistas y otros funcionarios públicos, parte de nuestra comunidad les adjudica una intención de búsqueda de recursos y riquezas de manera rápida e ilícita a los eventuales congresistas de ultramar.

Estima que “de mantenerse esta comprobada negativa percepción, el proceso de elección de los y las congresistas de ultramar posiblemente no motive un porcentaje de votantes suficiente como para llenar las expectativas que al respeto puedan tener los principales funcionarios electorales del país y los líderes políticos promotores y/o identificados con esta iniciativa ciudadana”.

Empero, Pérez estima que esta es una oportunidad para demostrar que el inmigrante dominicano es algo más que un simple emisor de remesas y cajas repletas de ropa, comida y electrodomésticos (…) para evidenciar que este ha adquiridos capacidades, experiencias y habilidades que combinada con voluntad política tras la búsqueda del bien común, llegado al Congreso puede marcar una diferencia y contribuir al adecentamiento y a la democratización de ese y cualquier otro órgano del Estado nacional”.