El presidente del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y senador, José Ignacio Paliza, tuvo que acudir de urgencia ayer a la Cámara de Diputados a desactivar un conato de conflicto entre los diputados, motivada por la contienda por la vocería de la bancada y que estaría, incluso, dividiendo a los diputados y a la propia Comisión Ejecutiva del partido.
Los perremeístas se ausentaron de la sesión por 15 minutos. La situación se desencadenó cuando el vocero de bloque, Ronald Sánchez, anunció en el hemiciclo -durante los turnos previos- que los diputados perremeístas votarían en la sesión, porque el Congreso Nacional dejó de estar militarizado.
Sánchez informaba la línea del partido tanto para la corriente del precandidato presidencial, Luis Abinader, como para la facción del precandidato presidencial Hipólito Mejía.
Sin embargo, las declaraciones de Sánchez fueron objetadas por los diputados del PRM, Ramón Bueno y Alexis Jiménez, como confirmó Bueno a Hoy, quien dijo que su decisión se debió a que tuvo un trato vejatorio a la entrada al Congreso, ayer, por un oficial que custodiaba una de las avenidas de acceso al Congreso. Expresó que Jiménez confrontó dificultad para entrar al Congreso. Bueno, quien tuvo un enfrentamiento con Sánchez, reclamó la presencia de Paliza y éste entonces dispuso no votar en la sesión. Sánchez reaccionó molesto. Volvió a la sesión, votó por un proyecto y se ausentó.