Pan integral sabroso y favorable

Pan integral sabroso y favorable

Tostadito, con un poco de margarina. En un sándwich, con el famoso dúo de jamón y queso o  con  atún, tomate, lechuga,  cebolla picadita y una cremita… El pan integral es sabroso de todas las formas.

¡Sabrosos hay  muchos panes! -dirá usted- pero  pocos pueden darse el lujo de presumir también de sus dotes nutritivas como éste.

Y es que está elaborado con harina de trigo no refinada (posee más salvado) y cuenta con  una gran cantidad de fibra dietética que agrega,   a sus dotes  de sabor, lo nutritivo.

Aporte a su dieta diaria.   A los beneficios de consumir pan integral ya mencionados  podemos agregar los siguientes:  Importante aporte de fibras, vitaminas y minerales.

Disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, ya que la fibra disminuye el colesterol malo, reduce los triglicéridos y aumenta el colesterol bueno; reduce el riesgo de cáncer, especialmente el colo-rectal y es beneficioso en caso de diabetes, pues disminuye la velocidad de la absorción de la glucosa.

Ayuda a combatir la obesidad, pues la fibra brinda mayor sensación de saciedad; además, mejora el funcionamiento intestinal, ya que  su alto contenido en fibras ayuda a regularizar el tránsito lento, previniendo la constipación.

Aliado de la figura.  Ya dijimos que es sabroso y nutritivo, pero la razón principal por la que el pan integral es famoso es por lo bien que le hace a nuestra figura.

Esto se debe a que -como explicamos anteriormente- es rico en fibras dietéticas, por lo que a diferencia del pan blanco, en vez de transformarse en grasa, estimula la desintoxicación del organismo.  Esta es la razón por la  que quienes son confesos amantes del pan puedan disfrutarlo sin remordimientos.

Hay para elegir.  No gustar de la monotonía no es una excusa válida para evadir el  consumo de pan integral, ya que además del sabor clásico, hay  deliciosas opciones: con almendra, con avena, con  miel y hasta con chispitas de chocolate.

Receta

Budín de pan integral

Para el caramelo: 80 gramos de azúcar , 3 cucharadas de agua.

Para el budín de pan: 6 rodajas de pan integral,  1 litro de leche, 1/2 libra de azúcar manzana verde rallada,  1/2 taza de pasas de uvas sin semillas, 1 cucharadita de esencia de vainilla, Ralladura de 1/2 limón , 3 huevos, (opcional), 1/2 cucharadita  de canela 

Preparación.  Tibiar la leche y volcar sobre las rodajas de pan, luego dejar reposar durante unos minutos. Acaramelar bien toda la base de un molde anillo y dejar enfriar. Terminar de deshacer bien todo el pan con ayuda de un tenedor, agregar el azúcar, la canela, la esencia y ralladura de limón, la manzana rallada, las pasas y los huevos, mezclar bien todo hasta integrar los ingredientes. Volcar  sobre el molde acaramelado. Cocinar a baño María en un horno precalentado a temperatura media ,  aproximadamente media hora, todo depende del horno, comprobar introduciendo un palillo que debe salir sin adherencias de la mezcla.

Cómo hacerlo

Para hacer su propio pan integral necesita 700 gramos de harina integral, 1 cucharadita de sal, 25 gramos de levadura fresca, 1 cucharadita de melaza , 25 gramos de harina de soja, 425 cc. de agua templada, y 1 cucharada de aceite de girasol. Inicie mezclando la harina y la sal en un recipiente caliente y seco. Mezclar la levadura, la melaza y la harina de soja. Remover  hasta que quede cremoso. Añadir 150 cc. de agua templada y  batir hasta que la levadura quede disuelta. Dejar  reposar en un lugar cálido hasta que aparezca espuma en la superficie,  verter sobre la harina,  añadir el agua restante y el aceite y  remover hasta que quede uniforme. Amasar hasta que todos los ingredientes queden unidos y la masa  adquiera una suavidad uniforme y un tacto aterciopelado. Poner en un recipiente, cubrir con un paño húmedo y  dejar reposar en un lugar cálido sin corrientes de aire. Después de una hora la masa habrá doblado su tamaño, será esponjosa, de textura firme y fácil de desprender de las paredes del recipiente. Sacar  la masa de la fuente y golpear en el centro para que salga todo el gas, volver a amasar unos minutos. Darle  la forma que elija del pan, dejar el pan en un lugar cálido, sin corrientes de aire, para que suba de nuevo, tardará media hora aproximadamente. Calentar el horno a 220 grados y cocinar el pan durante 40 minutos si está en un molde y 30 minutos si está en la bandeja. Sabrá que está cocido si suena a hueco al golpearlo.

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