Hoy 
WASHINGTON (AFP) – El secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, inicia este lunes su primera visita a América Latina desde que asumió el cargo con paradas en Colombia, Brasil y Chile para coordinar esfuerzos en la lucha contra el crimen en América Central.
La visita de Panetta arrancará en Bogotá, y es la primera de un alto cargo estadounidense a ese país tras el escándalo de los agentes del Servicio Secreto que utilizaron los servicios de prostitutas en la pasada Cumbre de las Américas en Cartagena.
Colombia ha contribuido al entrenamiento miles de policías en México y Centroamérica en los últimos años, y esa tendencia se acentuará tras la firma de un acuerdo bilateral con Washington durante la cumbre, que le da un nuevo rumbo al exitoso Plan Colombia.
«En el contexto de recursos limitados en términos de defensa en Estados Unidos, tenemos una oportunidad para asociarnos de forma que esos países puedan convertirse en exportadores de seguridad», explicó a la prensa una alta fuente estadounidense bajo anonimato.
«Sin esa clase de discusión podemos pisarnos unos a otros, perdernos oportunidades», añadió esa alta fuente.
El Pentágono afronta drásticos recortes presupuestarios en los próximos cinco años. Panetta se reunirá con su homólogo colombiano Juan Carlos Pinzón y con el presidente Juan Manuel Santos en Bogotá.
Durante la visita podría haber algún tipo de anuncio relativo a la ayuda a Colombia, según las fuentes en el Pentágono. Panetta viajará el martes a Brasilia para sendos encuentros con el ministro Celso Amorim y la presidenta Dilma Rousseff.
Mientras que la alianza con Bogotá se mantiene igual de sólida, la reciente anulación de un contrato de hasta 380 millones de dólares para la empresa aeronáutica brasileña Embraer, que debía proveer aviones ligeros para el ejército afgano, llenó de nubarrones la relación con el gigante sudamericano.
El Pentágono ha convocado una nueva licitación pero en el mejor de los casos la entrega de los aparatos no se producirá antes de 2014. Panetta está dispuesto a discutir el tema con su contraparte brasileña, dijo la alta fuente, sin más detalles.
El caso puede influir decisivamente en un megacontrato de 5.000 millones de dólares que Brasil mantiene en suspense para equipar con 36 nuevos cazas a su Fuerza Aérea, y para el que compiten Boeing, el francés Dassault y la firma sueca Saab. Siempre pendientes de atraer a Brasil a su esfera de intereses, Washington quiere también debatir la cooperación en Africa en temas como formación de cuerpos de paz, así como sobre la seguridad en torno al Mundial de Fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016.
«Esos acontecimientos deportivos de primera clase podrían ser objeto de ataques (terroristas). Estaremos muy contentos de poder dar apoyo a nuestros socios», dijo la alta fuente a periodistas. Tras su paso por Rio de Janeiro para dar una charla en una academia militar, Panetta viajará a Santiago de Chile, donde la experiencia militar en lucha contra desastres naturales interesa a Washington.
Ahí mantendrá de nuevo reuniones con el ministro de Defensa Andrés Allamand y el presidente Sebastián Piñera.
Estados Unidos prepara igualmente la próxima conferencia ministerial de Defensa de las Américas en Montevideo, en octubre. Un total de 14 países podrían firmar en esa cita la creación de un mecanismo de cooperación regional de fuerzas militares en caso de desastres naturales, informó otra fuente a los periodistas.
