Washington. EFE. El Servicio Secreto de EE.UU. interrumpió ayer la conferencia diaria del portavoz de la Casa Blanca para evacuar temporalmente la sala de prensa y uno de los jardines de la residencia presidencial, debido a amenaza de bomba comunicada por teléfono que resultó ser falsa.

“Tenemos que evacuar la sala de prensa”, dijo un hombre, presuntamente un agente del Servicio Secreto, que irrumpió en la habitación mientras el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, ofrecía su conferencia de prensa diaria. “Reanudaremos (la conferencia de prensa) más tarde”, se limitó a decir Earnest a los periodistas, que preguntaron en vano cuál era el problema y abandonaron la sala de prensa mientras escribían mensajes en Twitter sobre el incidente.

Alrededor de media hora después de la evacuación, los periodistas pudieron volver a entrar en la sala y la conferencia de prensa se reanudó, después de que un equipo de agentes del Servicio Secreto inspeccionara la habitación acompañado de perros adiestrados para la detección de explosivos.

“Poco antes de las dos de la tarde, hubo una amenaza de bomba transmitida por teléfono a la Policía Metropolitana de Washington sobre la sala en la que estamos ahora. La Policía contactó al Servicio Secreto, que determinó que, para la seguridad de todos ustedes, tenían que evacuar la habitación”, explicó Earnest al reanudar la conferencia de prensa. “El Servicio Secreto pudo registrar esta sala y concluir que estaba en condiciones de seguridad”, agregó.