NUEVA YORK.   EFE.  El papa Benedicto XVI concluyó ayer su primera visita a Estados Unidos con una misa en el estadio de béisbol de los Yankees de Nueva York, donde fue aclamado por unas 57,000 personas.

Como se ha podido apreciar en estos seis días de viaje del pontífice, los católicos estadounidenses han respondido con entusiasmo y cariño hacia la figura de Benedicto XVI, un Papa del que no sabían demasiado pero que sentían mucha curiosidad por conocer.

En el estadio de los Yankees, y rodeado de una escenografía espectacular, en puro estilo hollywoodiano, y con los colores del Vaticano- el blanco y el amarillo -, el Papa volvió a recibir el calor de los católicos, entre ellos muchos hispanos que hicieron oír sus coros en español. Un cariño que quedó plasmado cuando tras la ceremonia el Papa desfiló entre aplausos por una pasarela bajo las notas del himno de la alegría de Ludwig van Beethoven y los gritos de “We Love You” (te queremos) de los fieles.

La misa fue un claro ejemplo del “bilingüismo”, español e inglés, que se vive en muchas ciudades de Estados Unidos, pero también en el seno de la Iglesia.

Entre los católicos de Estados Unidos, el 29%  son latinos.

Benedicto XVI

El rostro de la comunidad católica en vuestro País ha cambiado considerablemente. Pensemos en las continuas oleadas de emigrantes, cuyas tradiciones han enriquecido mucho a la Iglesia en todo los lugares de  América ”.