Papa condena “ideologías” y corrupción en visita a Paraguay

Papa condena “ideologías” y corrupción en visita a Paraguay

ASUNCIÓN.- El papa Francisco condenó ayer las ideologías que terminan en dictaduras, al igual que la corrupción, y pidió más igualdad en Paraguay, última parada de su gira sudamericana donde improvisó un encendido discurso político la víspera de volver a Roma.

El pontífice sostuvo que «las ideologías terminan siempre en dictaduras». «Las ideologías terminan mal, no sirven, no asumen al pueblo. Por eso, fíjense, en el siglo pasado en qué terminaron las ideologías: en dictaduras siempre», aseveró generando aplausos entre las más de 5,000 personas que asistieron al estadio León Condou de Asunción.

Mientras respondía las preguntas, algunas pronunciadas en guaraní, de 6 líderes sociales, el papa Francisco tildó a la corrupción de ser la «gangrena de un pueblo». «Otro método que no da libertad es el chantaje y eso es siempre corrupción», afirmó el pontífice tras recalcar que es un fenómeno que se repite «en todos los pueblos del mundo», dijo.

También llamó especialmente a los jóvenes «a jugársela por algo, a jugársela por alguien. No tengan miedo de dejar todo en la cancha. No tengan miedo de entregar lo mejor de sí», y usando una metáfora propia del mundo del fútbol, agregó: «Jueguen limpio. No sobornen al referi».

Antes de este discurso, el más político en su gira que lo ha llevado desde el pasado 5 de julio a Ecuador y Bolivia, Francisco se emocionó en Caacupé, 50 km al este de Asunción al pedir no perder la memoria, las raíces, ni la razón de las luchas.

Como en casa

«Estar aquí con ustedes es sentirme en casa, a los pies de nuestra Madre La Virgen de los Milagros de Caacupé», dijo ante cientos de miles de personas que cargaron pancartas con frases célebres del sumo pontífice y ondearon banderas del Vaticano, de Paraguay y Argentina, de donde viajaron miles de compatriotas del papa.

Uno de los momentos de mayor alegría colectiva ocurrió al rezar el padre nuestro en guaraní, cuando se vio al papa articular unas palabras en esta lengua, oficial al igual que el castellano, en esta nación de siete millones de habitantes, 90% de ellos católicos. «¡Hagan lío!» fue una de sus frases célebres reproducidas en pancartas entre una multitud que lo esperó con cantos y gritos.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas