CIUDAD DEL VATICANO (AFP).- El Papa Benedicto XVI criticó «el poder, la riqueza y el deseo de prestigio» e instó a los católicos a fomentar «sentimientos de humildad, entrega, desprendimiento y generosidad» durante la tradicional audiencia general de los miércoles en la Plaza de San Pedro.

«Cristo humillado por la muerte más infame, como es la crucifixión, es propuesto como modelo de vida para los cristianos. En efecto, éstos deben tener sus mismos sentimientos, que son de humildad y entrega, de desprendimiento y de generosidad», afirmó en español ante cerca de 20.000 personas.

Benedicto XVI, quien celebra todos los miércoles la audiencia general como su predecesor Juan Pablo II, dedicó su discurso al papel de Cristo.

«No usó su poder como instrumento de triunfo, signo de distancia o expresión de supremacía», dijo.

«Al contrario, asumió sin reservas la condición humana, mísera y débil, marcada por el sufrimiento, la pobreza y la fragilidad, sometida al tiempo y al espacio», agregó.

El Papa se dirigió en varios idiomas a los presentes y saludó en español a los peregrinos de España, Argentina, México, Puerto Rico, Costa Rica y Honduras, a quienes les recordó que el próximo viernes se celebra la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, venerada en toda América Latina.