¿Papá de quién?

¿Papá de quién?

Luego de superar el “lluvia gate”, los Tigres del Licey y las Aguilas Cibaeñas finalmente se enfrentaron ayer en el Estadio Quisqueya, de la capital.

Y los Tigres del Licey demostraron que ellos no tienen ningún papá a quién pedirle bendición.

El receptor Ronny Paulino conectó un doble remolcador de tres carreras y el Licey venció 5-2 a las Aguilas.

Paulino limpió las bases en una segunda entrada de cuatro anotaciones, contra un Nelson Figueroa que lució muy diferente al que previamente había dominado al Licey.

En su actuación, Paulino terminó de 1-1, con cuatro remolcadas, dos transferencias y un elevado de sacrificio.

Figueroa (0-1) lanzó apenas dos entradas y permitió cinco carreras, mientras las Aguilas perdieron su tercer encuentro seguido de la serie semifinal.

Los Tigres también contaron con una buena ofensiva del jardinero Emilio Bonifacio, quien bateó de 3-2, con un triple y un sencillo y una anotada.

En el pitcheo también obtuvieron el respaldo de Ramón Ortiz (1-0), quien lanzó seis entradas en las que aceptó cuatro hits y dos carreras limpias. Dio dos transferencias y abanicó dos hombres.

El cerrador Carlos Mármol embasó dos hombres en la novena entrada, pero consiguió frenar la amenaza, contando con dos buenas jugadas defensivas para terminar el encuentro y conseguir el rescate.

Por las Aguilas, Luis Polonia bateó de 4-3, con un triple y una remolcada, mientras que el torpedero T.J Peña bateó de 3-2, con una empujada.

Fermín expulsado.  El dirigente de las Aguilas, Félix Fermín fue expulsado del partido por discutir una jugada apretada en la primera base.

 En lugar de Fermín, su equipo de coaches se encargó de marcar las decisiones que se tomaron en el encuentro.

El protagonista

Ramón Ortiz

Lanzador  abridor

Gran apertura.   El derecho Ramón Ortiz, quien estaba programado originalmente para lanzar contra las Aguilas pero en Santiago el día anterior, lanzó seis entradas de apenas dos carreras y cuatro indiscutibles para darle al Licey una muy necesitada victoria, principalmente contra sus archirrivales Aguilas Cibaeñas, que siguen sin ganar en lo que va de round robin, arrancando la semifinal con una marca de 0-3.

Las claves

1.  Ataque temprano

Los Tigres del Licey no le dieron tregua al abridor Nelson Figueroa al fabricarle cinco carreras en dos entradas de trabajo, logrando sacarlo de ritmo con varias jugadas al cuadro que lo obligaron a moverse mucho.

2.  Buen relevo

 Luego de la salida de Ramón Ortiz, quien dominó por seis entradas completas, cuatro relevistas se combinaron para permitir apenas un indiscutible de la diezmada ofensiva aguilucha.

3.  Defensa azul

Cuando Carlos Mármol se metió en problemas en la novena entrada, Willy Aybar y Anderson Hernández brillaron con el guante.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas