CIUDAD DEL VATICANO. El papa Francisco pidió el domingo a los líderes del gobierno y de la sociedad de Venezuela que eviten más violencia en el país, aludiendo al creciente número de fallecidos, heridos y presos.
Francisco dijo a los fieles reunidos en la Plaza de San Pedro que, unido a las familias de las víctimas en su dolor, hacía un llamado sincero «al gobierno y a todos los componentes de la sociedad venezolana para que se evite toda forma de violencia, se respeten los derechos humanos y se busquen soluciones negociadas».
Los venezolanos están cansados de las graves «crisis humanitarias, sociales, política y económica» que afligen al país, agregó el pontífice. Las tensiones políticas en Venezuela se han intensificado luego de dos sentencias que el Tribunal Supremo emitió a fines de marzo, en las que asumió las atribuciones de la Asamblea Nacional y limitó la inmunidad de los legisladores. Aunque el máximo tribunal, acusado de estar controlado por el gobierno, revirtió los fallos, las protestas no han cesado y en ellas han perdido la vida 29 personas. La oposición al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, lleva semanas protestando en la calle para exigir la celebración de elecciones y la puesta en libertad de quienes considera presos políticos.
Francisco rezó por la «paz, reconciliación y democracia» en la «querida» nación. El papa habló luego de que la víspera concluyó una visita de dos días a Egipto, donde respaldó a los cristianos en esa nación mayoritariamente musulmana, que se han vuelto blanco de ataques frecuentes de extremistas islámicos. A bordo del avión papal en su regreso a Roma, Francisco declaró el sábado que deben cumplirse ciertas condiciones y garantías antes de llevar a cabo nuevos esfuerzos de mediación en un intento por resolver la crisis política venezolana.