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Ciudad del Vaticano, 24 feb. – El papa Juan Pablo II, de 84 años, está siendo sometido a diferentes análisis clínicos y pruebas especializadas en el Policlínico Gemelli, de Roma, donde fue ingresado de nuevo hoy debido a una recaída del proceso gripal que le volvió a causar una crisis respiratoria aguda.

El equipo médico que atiende al sumo pontífice en el policlínico Gemelli está reunido para analizar la posibilidad de realizar una traqueotomía para facilitarle la respiración, aseguraron este jueves fuentes de prensa italianas.

El Vaticano, de momento, no ha precisado qué tipo de pruebas le está realizando el equipo de médicos que dirige el doctor Rodolfo Proietti, que es el mismo que le cuidó entre el 1 y el 10 de febrero pasado, la última vez que fue hospitalizado.

Aunque el hermetismo es total, fuentes sanitarias dijeron que el Papa sufrió una crisis respiratoria aguda similar a la que obligó su anterior hospitalización y que aunque en un primer momento no ha sido intubado, no se descarta que lo pueda ser en las próximas horas.

Las mismas fuentes precisaron que «no se teme por su salud», aunque la preocupación es grande, ya que no hay que olvidar que Juan Pablo II padece parkinson, que le está afectando los músculos respiratorios y la laringe.