Viena. EFE. En la religión, en la economía, en la vida social, el vino lleva milenios siendo un elemento esencial de la humanidad; una presencia que el Museo de Historia del Arte de Viena analiza ahora en una exposición que reúne obras de arte, objetos cotidianos e incluso sofisticados juguetes relacionados con esta bebida.

“Ha habido tantas exposiciones sobre Baco que iba a ser aburrido hacer otra sobre el tema, así que pensamos hacerla sobre el vino en sí y se fue desarrollando como un tema fantástico”, explica a Efe Georg Plattner, uno de los comisarios de la exposición “Arte rebosante de vino” que acaba de abrir sus puertas y puede visitarse hasta el 2 de septiembre, donde exhiben 100 objetos de las distintas colecciones del museo vienés para montar un viaje que parte desde el Antiguo Egipto y llega hasta nuestros días.

Plattner recuerda que el vino ha tenido una importancia social enorme en distintas sociedades y tradiciones, desde los simposios o banquetes de la Grecia clásica, a la eucaristía cristiana o las lujosas cortes renacentistas europeas. Así, la exposición exhibe desde vasos fúnebres egipcios del tercer milenio antes de Cristo hasta una moderna copa de vino de la cafetería del propio museo, para analizar la evolución del precio del vino a lo largo de los siglos.