Después de recorrer todas las áreas de la casa, los diseños elegantes y futuristas han llegado al baño. Y es que antes, el diseño de los muebles de baño apostaba solo por lo funcional, sin embargo, hoy en día el buen gusto permite hacer del baño un lugar de belleza y relajación.
Un ejemplo del cambio que se ha producido son los lavamanos, que de ser una pieza sencilla ha pasado a ser un acento decorativo.
El lavamanos ha adoptado diferentes posibilidades, variando su forma, tamaño, los materiales con los que se fabrica, los colores y otros adornos.
De este modo, además de ser totalmente funcional, también puede ser extremadamente lujoso y selecto, engalanando su baño, una de las estancias más importantes de la casa.
Materiales como cristal (tanto transparente como de colores), piedra, hierro, metal, madera, e incluso bronce, han ido desplazando la cerámica en el diseño de los lavamanos. En cuestión de estilo también se han producido cambios: ahora los hay además de ovalados, cuadrados, en forma de cascada, de círculos, rectángulos, etc.
Modernos y prácticos
Las tendencias en el diseño de muebles de baño son varias, pero todas están enfocadas a un mismo propósito: retomar la relevancia de este cuarto como parte esencial en la ambientación de interiores. Por eso, a la hora elegir un lavamanos, combínelo con la bañera y el inodoro, ya que a esas piezas ha llegado también la modernidad.
El lavamanos ideal
Según sus necesidades y preferencias, el lavabo puede estar exento o incluido dentro de un mueble con repisa o mesa auxiliar, puede ser de uno o doble seno, pero hay cosas importantes a tomar en cuenta a la hora de elegirlo. Busque un lavamanos que sea lo suficientemente amplio como para que pueda desarrollar de manera correcta y cómoda sus funciones.