El director ejecutivo de la Fundación Zile, Edwin  Paraison, afirmó ayer que  la presencia de  112  trabajadores haitianos frente al Ministerio de Trabajo reclamando el pago de prestaciones laborales, fuera del proceso legal administrativo, plantea un problema humanitario que debe ser tratado por las autoridades de República Dominicana y  de Haití.

 Paraison propuso un diálogo entre el Ministerio de Trabajo, los  trabajadores y sus abogados, las autoridades diplomáticas haitianas y representantes de la sociedad civil dominicana que trabajan el tema haitiano, para tratar de buscar una “salida humanitaria”  antes de Año Nuevo.

Compartir.  Paraison habló   en   una cena de Navidad que líderes de la diáspora haitiana ofrecieron la noche del 24 a sus compatriotas que pernoctan frente al Ministerio de Trabajo desde el día 14 de de este mes, debido a un litigio legal.

Refirió que el  grupo de trabajadores haitianos y sus familiares, en su mayoría en situación migratoria irregular, se han quejado en contra de su antiguo patrón propietario de una finca de comercialización de cocos en el kilómetro cinco de San Cristóbal “Coquera de Villo” por el cierre de su empresa sin pagarles tres meses de salario y sus prestaciones.

Agregó Paraison que según  los abogados de los reclamantes,  el Ministerio de Trabajo  no respetó los procedimientos de protección a los trabajadores cuando autorizó el cierre de esa empresa.

La actividad comenzó  con la bendición de los alimentos e incluyó cantos y oraciones de los participantes en creole y en español, informó Paraison en un documento de prensa.