POR LOYDA PEÑA
El ex cónsul de Haití, Edwin Paraison, dijo ayer que las autoridades dominicanas han sido apáticas para resolver los crímenes contra haitianos asesinados en la República Dominicana y para someter los responsables a la justicia.

Paraison también dijo que los haitianos que guardan prisión por el asesinato de la señora Maritza Núñez, en Hatillo Palma, Montecristi, no tienen nada que ver con el hecho y pidió a las autoridades judiciales dominicanas profundizar las investigaciones.

Asimismo, rechazó que los tres jóvenes haitianos acuchillados y quemados la pasada semana próximo al peaje de Haina, fueran delincuentes.

Sostuvo también que la «saña» conque se perpetró ese horrendo crimen, deja ver el efecto de la campaña antihaitiana que, afirmó, llevan a cabo algunas personas en espacios arrendados a medios de comunicación.

«Hay una alta preocupación a todos los niveles de la comunidad haitiana, tanto los grupos organizados como la Pastoral Católica, el Diálogo Dominico-Haitiano de las iglesias evangélicas, instituciones como CEDAIL y otras que se mueven en la comunidad haitiana y acompañan por años de manera solidaria a los inmigrantes haitianos en la República Dominicana, por el nivel a que ha llegado la situación con ese triple crimen», subrayó Paraison.

Manifestó que de acuerdo a indagaciones que él mismo hizo en el lugar de los hechos, todo el mundo coincide (haitianos y dominicanos) en señalar que Paul Marcos, Gilbert Dominique y Willie Pie, quienes fueron quemados vivos, eran tres muchachos tranquilos y ajenos a situaciones delictivas.

El ex diplomático haitiano habló en esos términos, al comparecer como invitado en el programa D’Ágenda que produce el periodista Héctor Herrera Cabral por Telesistema, canal 11.

Paraison deploró que además de no castigar a los responsables de asesinar a estos haitianos, las autoridades dominicanas obliguen muchas veces a estos últimos a pagar por delitos que no han cometido, «como ocurre con los haitianos presos por la muerte de la señora Maritza Núñez».

Se quejó también de que cuando en República Dominicana se apresa a un haitiano, no es comunicado a las autoridades consulares de Haití, en franca violación a los convenios internacionales sobre los derechos de los refugiados.

«Personalmente he hablado con alrededor de 20 personas, tanto  haitianos como dominicanos, que viven en la zona del Mirador del Oeste, no muy lejos del peaje de Haina y todos coinciden en decir que los muchachos (haitianos incinerados) eran tranquilos, que no son personas cercanas a actos de delincuencia, como en un primer momento se quiso decir”, puntualizó Paraison.