El presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, dijo ayer que no ha tenido ningún vínculo con personas ligadas a hechos pecaminosos y significó que el  apartamento  en el que vive junto a su esposa e hijos lo adquirió en el  2005 con un préstamo del Banco Popular que no ha terminado de pagar.

 El también secretario general peledeísta resaltó la educación moral que le dieron sus padres junto a sus otro tres hermanos.

Expresó que cuando adquirió el inmueble a la constructora DAPS, C por A, nadie le comunicó de dónde procedía la propiedad.

De esta manera Pared Pérez le salió al paso a lo publicado, originado en el portal Wikileaks, respecto a preguntas del otrora embajador norteamericano Hans Hertell en el  2006 al entonces procurador Francisco Domínguez Brito, en el sentido de que dos prominentes políticos, incluido Pared Pérez, habían adquirido apartamentos pagados por los hermanos Ulloa, extraditados a Estados Unidos por tráfico de drogas.

Dijo que se enteró después que el inmueble había pertenecido a esa familia.

Pared Pérez mostró sus pasaportes, ordinario y diplomático, así como la visa con la cual ingresa a los Estados Unidos sin inconvenientes. Dijo que tuvo la oportunidad de explicar el caso a Hertel para evitar sospechas injustificadas.

“No tengo de qué arrepentirme, gracias a Dios”, dijo Pared Pérez. Expresó que Domínguez Brito lo llamó   para ratificarle el respaldo a su honestidad y, por su lado, el senador Julio César Valentín  señaló que ni siquiera los perversos arrojan dudas sobre la honorabilidad del secretario general peledeísta.