Efe-Reportajes. Los diseñadores más deseados del momento subieron a la pasarela prêt-à-porter las propuestas para el próximo otoño-invierno, un avance imposible de pasar por alto, marcado por la caída en desgracia del modisto John Galliano.

La semana de la moda de París, además de un escaparate con las nuevas propuestas para el próximo otoño-invierno, se ha convertido en una gran casa de apuestas por ver quién acierta el nombre del sucesor de John Galliano al frente de la casa Dior, tras su fulminante despido.

En París se han visto mujeres muy femeninas, luminosas y con notas sensuales envueltas en patrones que modelan su figura y adornadas con infinidad de bordados y pedrería. Pero también se ha visto  en la capital de la moda mujeres andróginas con propuestas sobrias de corte masculino. 

La diseñadora portuguesa Fátima Lopes fue la encargada de abrir la Semana de la Moda de París con una propuesta inspirada en los años 60, llena de asimetrías, bañada en blanco y negro y empañada por la caída en desgracia de Galliano, después de que se hiciera público un vídeo en el que el “gurú” de la moda, visiblemente alcoholizado, decía amar a Hitler.

El negro también fue el denominador común de la colección del modisto asiático Harry Halim, creador de la firma Harryhalim.

El azul en todo su esplendor fue el color elegido por la empresa Aganovich para crear piezas de cortes asimétricos y superposiciones de prendas en tejidos como el terciopelo, la lana y otros materiales nobles.

Guy Laroche exhibió a una mujer elegante y femenina, arropada con prendas que rebosaban bordados de pedrería y fabulosos conjuntos de pieles.buen gusto.

El modisto italiano Marco Zanini, quien crea  para Rochas, mostró vestidos de noche con grandes volúmenes en la espalda con escote palabra de honor en tonos dorados y negros.