Parlamento venezolano no acepta resultados de elecciones regionales

Parlamento venezolano no acepta resultados de elecciones regionales

El Parlamento es el único poder del Estado controlado por la oposición/Foto: Fuente externa.

Caracas.- La Asamblea Nacional de Venezuela (AN, Parlamento), de mayoría opositora, declaró hoy como fraudulento el proceso electoral celebrado el pasado domingo y en el que el chavismo gobernante venció en 18 de las 23 gobernaciones en disputa.

La Cámara declara “como fraudulento el proceso de elecciones de Gobernadores llevado a cabo el 15 de octubre de 2017, así como las actuaciones del Consejo Nacional Electoral (CNE), en alianza con el gobierno nacional y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ)”, señala el acuerdo aprobado este jueves únicamente por diputados opositores.

El Parlamento -que es el único poder del Estado controlado por la oposición- exigió además al CNE que “facilite la realización de una auditoría integral, cualitativa y cuantitativa” de todo el proceso electoral por parte de “organismos internacionales” y “a cargo de expertos independientes».

El acuerdo de la AN contempla además “crear una Comisión especial encargada de documentar exhaustivamente las violaciones al proceso electoral perpetradas” por el CNE y el resto de órganos del Estado “que están al servicio del Ejecutivo».

Además, el Parlamento denunciará ante la comunidad internacional “la grave violación de la soberanía popular y de los derechos políticos” que a su juicio ha cometido el CNE, para lo que empezará remitiendo el acuerdo adoptado hoy a instancias internacionales que se ocupan de los derechos humanos y democráticos.

La oposición venezolana ha venido denunciando graves irregularidades en el proceso electoral que culminó el domingo con las elecciones regionales a gobernadores de los 23 estados del país, que se celebraron con más de diez meses de retraso según la fecha que había de haberse fijado siguiendo la ley.

Entre estas irregularidades están la negativa del CNE de retirar a los candidatos opositores que perdieron en las primarias de las papeletas, en lo que la alianza de oposición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) considera una maniobra para confundir a los electores.

El CNE también cambió de sitio a última hora más de 200 colegios electorales en los que votaban más de medio millón de ciudadanos residentes en zonas tradicionalmente opositoras.

Los candidatos de oposición -que no aparecieron en toda la campaña en las televisiones públicas más que para ser desacreditados- denunciaron además actos de violencia contra sus votantes por parte de grupos de civiles armados afectos al chavismo, así como la extensión del horario de voto para movilizar a más oficialistas.

La MUD ha presentado asimismo supuestas pruebas de falsificaciones de resultados, para las que el aparato del Estado y del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) habría expulsado a la fuerza a los testigos de la oposición de los centros.