POR ELVIS LIMA
Miles de pasajeros del transporte público urbano e interurbano permanecieron ayer varados durante varias horas, por un paro en el servicio que afectó las terminales del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, originado en el conflicto desatado por el aumento en el precio del pasaje.

La situación se agudizó en horas de la tarde, lo que provocó la desesperación de los usuarios ante la falta de unidades para transportarse.

Los puntos más neurálgicos fueron los del polígono central que comprende las terminales de las avenidas 27 de Febrero, Winston Churchill, Abraham Lincoln y Jhon F. Kenneddy. El paro también afectó a usuarios de las provincias San Cristóbal y Peravia, así como el municipio de Haina.

Igual situación se vivió en las paradas de los kilómetros 9 de Herrera, de Manoguayabo y de Las Caobas, así como de la mayoría de la provincia Santo Domingo.

En cada una de esas terminales, largas filas fueron formadas por desesperados pasajeros, quienes se vieron obligados a organizarse para poder abordar las pocas guaguas que laboraban, mientras que en los demás casos se vivió la ley del más fuerte.

“¡Entra que caben más!” Vociferó un cobrador a una joven estudiante cuando ésta intentó abordar una guagua en el kilómetro  9, la que llevaba como 40 pasajeros, aunque su capacidad era de 30.

Además de los inconvenientes desatados por el costo del pasaje, muchos pasajeros tuvieron que defenderse de los hechos de violencia generados por la diferencia de criterios entre algunas centrales sindicales por el aumento de un peso dispuesto por las autoridades.

TARIFAS DIFERENTES

Aunque el alza acordada por las autoridades con algunas centrales sindicales era de RD$1.00, en la práctica no fue así, lo que provocó la irritación de muchos pasajeros.

“Eso es un crimen, aumentar de R$10 a RD$12, de la Churchill a la feria. ¿Cómo vive uno?, ¿Vamos a trabajar sólo para pasajes?”, se preguntó Wilfredo Mesa, un estudiante de derecho.

Precisamente, la terminal de la Winston Churchill fue escenario de protesta entre pasajeros, choferes y autoridades, quienes arrestaron a varios conductores que violaron la disposición oficial.

De su lado, varios choferes justificaron su decisión de aumentar a los pasajes más de lo establecido por las autoridades, debido a los altos precios de los combustibles.

José Pichardo, vocero del Sindicato de Choferes de la Churchill, acusó a las autoridades de ser inconsecuente con los trabajadores del volante, porque a su juicio el aumento de un peso no compensa los altos costos.

SINDICALISTAS DIFIEREN

Las diferencias de criterios por el aumento del pasaje que mantienen los principales directivos de los sindicatos que aglutinan las unidades del transporte, es otro de los elementos que motivaron la huelga de ayer en el transporte.

De las tres principales centrales sindicales, sólo la Confederación Nacional del Transporte (CONATRA) objetó el aumento del pasaje, por entender que dicha partida es un plan del gobierno para poder justificar el retiro del subsidio al Gas Licuado de Petróleo.

Antonio Marte, presidente de la entidad, condicionó la entrada en servicio para hoy de las unidades que fueron sacadas de rutas, siempre y cuando el gobierno les dé seguridad a los transportistas.

Manifestó que en los incidentes de ayer, decenas de unidades resultaron con los cristales rotos y que esa situación no puede seguir así.

Asimismo, acusó a la Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción (FENATRANO), de ser los responsables de los incidentes.

De su lado, Juan Hubieres, presidente de FENATRANO, negó la acusación de Marte y reafirmó que su organización seguirá cobrando la tarifa acordada con las autoridades.

“Estos aumentos son legales. Desde el pasado cinco de agosto nosotros venimos advirtiéndoles a las autoridades que los precios de los combustibles tienen el sector a punto de desaparecer”, explicó Hubieres.

De su lado, Ramón Pérez Figuereo, presidente de la Central Nacional de Transportistas Unificados (CNTU), demandó del gobierno diseñar en lo inmediato una tarifa  real del transporte, a fin de corregir las distorsiones existentes.

Dijo que los incidentes de ayer evidencian la urgencia que tiene el país de crear una política nacional de transporte.