De boca dura y corazón tierno, son palabras que a juicio de monseñor José Arnaiz definen al cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, quien anoche fue reconocido por la parroquia San Antonio de Padua por sus 50 años de vida sacerdotal.
El reconocimiento se llevó a cabo en el hotel Barceló Santo Domingo en el marco de la celebración de los 91 años de la parroquia San Antonio de Padua, de Gascue, y de la IX Cena de Gala Empresarial de la Confraternidad.
Dios me ha permitido vivir 50 años de fidelidad y sobre todo de servicio, dijo López Rodríguez, quien ingresó al seminario a los 14 años de edad y que desea le recuerden como un dominicano nato, neto y nítido.
En el acto, el padre Benito Angeles destacó su labor y su interés por la niñez, los jóvenes y la educación.
Se reconoció al presidente del INDOTEL, David Pérez, quien entregó una cámara de televisión para el canal de la Iglesia Católica, y al senador José Rafael Vargas. La cantante Celiné Díaz interpretó varias canciones.
El Banco de Reservas patrocinó la actividad.