Las estadísticas son reveladoras de la situación en que se encuentra la mujer dominicana en lo que respecta a su participación en la política y a la conquista de espacios de poder y de decisión en el país.
A pesar de que el voto de la mujer es el que tradicionalmente ha determinado el triunfo en las elecciones, que en los niveles educativos representan el 62.7% del estudiantado universitario y que la lista las encabezan las mujeres con mejores índices académicos, esto no se refleja en una mayor cuota de participación.
La realidad es que, en el Senado de 32 legisladores, sólo hay dos mujeres, representando esto el 6%, y en la Cámara de Diputados las damas están representadas en un 16%. En tanto, de 116 síndicos nueve son hembras. El mayor número de participación de las mujeres se registra en las regidurías, sin embargo, también quedan cortas. De 787 regidores 225 son féminas para un 18.5% Las vicesindicaturas están representadas en un 93%, lo que no es gran ventaja para las mujeres porque muchas veces tienen que depender de los espacios que les quieran otorgar los síndicos.
Obstáculos
En ocasión de celebrarse el domingo el Día Internacional de la Mujer, HOY consultó a expertas en estudios sobre género. Sergia Galván, directora ejecutiva del Colectivo Mujer y Salud; Lourdes Contreras, coordinadora general del CEG-INTEC y Magalys Pineda, directora ejecutiva del Centro de Investigación Para la Acción Femenina (Cipaf) hicieron una evaluación sobre el presente y el futuro de la mujer dominicana en la política.
Galván atribuye la baja participación y espacios de poder de la mujer al machismo, la sociedad patriarcal que predomina aún, el clientelismo que se ha acrecentado más con la implementación del voto preferencial. Además a lo excluyente de las estructuras partidarias y del Estado.
Cita que pocas mujeres son secretarias de Estado y una minoría ocupa los cargos dirigenciales de los partidos. Contreras ve como principal obstáculo de las mujeres para crecer políticamente la estructura del sistema de partidos que vive el país. Pineda afirma que el 8 de marzo encuentra a las dominicanas fuera del poder político.
La clave
Senado reconoce mujeres
El Senado aprobó ayer el reconocimiento mediante resolución de Arlete Fernández, Gladys Gutiérrez y Altagracia del Orbe, por su entrega a los ideales más nobles de la patria y constituirse en ejemplo de la dignidad humana y pureza moral para las generaciones.
Sergia Elena de Séliman
Doble esfuerzos
La ex secretaria de Organización del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) y ex candidata a vicesíndica, en una alianza con el PRD, en el 2006, no confrontó mayores dificultades para lograr ocupar uno de los principales cargos dirigenciales en el reformismo. Dice que perdió la vicesindicatura del Distrito Nacional no porque era mujer, sino por otras circunstancias. Se considera una mujer exitosa políticamente y lo atribuye a su constancia, trabajo tesonero y perseverancia en sus propósitos. Admite que para triunfar en política tiene que esforzarse doblemente Dice que su carrera ha sido exitosa porque su partido ofrece oportunidades y reconoce el trabajo de sus mujeres. Observa como dificultad los recursos económicos.
Peggy Cabral
Reciben muchos codazos
Aunque ha logrado ocupar importantes cargos en su partido, el Revolucionario Dominicano (PRD) y ser candidata a cargos electivos, afirma que no le ha sido fácil. Considera que los aspectos culturales y económicos contribuyen para que las mujeres no crezcan políticamente. Es fundadora de la Fedomusde, creada por los años 80; además fue la primera vicesíndica del Distrito Nacional y ex candidata a síndica en la capital, en 2002. Fue una promotora junto a su esposo, el fenecido José Francisco Peña Gómez, para que se estableciera la cuota del 33% para las mujeres, es que, dice, los hombres ponen zancadillas a las mujeres y son más aguerridos en la búsqueda de recursos económicos para financiar sus campañas.