Caracas.- El partido Voluntad Popular (VP), liderado por el dirigente preso Leopoldo López, se encuentra bajo el escrutinio de las autoridades de seguridad de Venezuela por ser la organización que supuestamente estaría planificando un golpe de Estado contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
Las autoridades del servicio de inteligencia sumaron esta jornada más argumentos contra VP y anunciaron próximas detenciones de otros participantes en el supuesto plan de golpe mientras los dirigentes de la organización denuncian una “arremetida brutal».
El jefe del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), Gustavo González López, señaló hoy al exalcalde encarcelado Daniel Ceballos, al alcalde Delson Guarate y al diputado Lester Toledo, todos miembros de VP, como los “principales promotores del plan conspirativo” junto al dirigente del partido Avanzada Progresista, Carlos Melo. Ceballos fue trasladado el pasado 27 de agosto desde su casa, donde cumplía arresto domiciliario, hasta una cárcel ubicada en Guárico (centro) por supuestamente planificar su fuga.
En los planes se “individualizan responsabilidades” y al dirigente de VP Yon Goicoechea, también detenido por el Sebin, se le señala con cargos como “financiamiento al terrorismo” y “asociación para delinquir».
Goicoechea y Melo fueron aprehendidos en Caracas el 29 y 30 de agosto, respectivamente, por supuesta posesión de material explosivo, días previos a la marcha opositora convocada para el 1 de septiembre para presionar al Poder Electoral a dar las fechas de la próxima etapa del referendo revocatorio al mandato de Maduro.
Estas detenciones serían el inicio de una “ola de persecuciones» en contra de los dirigentes de Voluntad Popular, según denuncia la organización política. Los opositores aseguraron hoy que también han recibido amenazas directas el diputado Luis Florido, el alcalde del municipio caraqueño de El Hatillo, David Smolansky, y el coordinador encargado de la dirección nacional de Voluntad Popular, Freddy Guevara.
Por todo lo anterior, los dirigentes nacionales del partido opositor fueron este lunes a la Fiscalía para denunciar la “arremetida brutal” en su contra, que ha dejado, según Guevara, unos «15 perseguidos políticos” entre presos, exiliados y personas en la clandestinidad.
El dirigente pidió el cese de la “persecución” política y de las amenazas por parte del Gobierno de Nicolás Maduro y exigió a la Fiscalía dar a conocer si existe o no un procedimiento legal contra el partido fundado por Leopoldo López, preso desde hace más de dos años y condenado a casi 14 años de cárcel. Guevara dijo que el partido se pone a la orden para que se investigue “cualquier tipo de acusación absurda” en el que se quiera involucrar a los dirigentes “con un cambio no democrático en Venezuela” e invitó al Gobierno a detenerlos “a todos».
El coordinador de VP explicó que Maduro acusó al partido de López de supuestamente estar montando un golpe de Estado y lo calificó como “banda terrorista” ante los medios de comunicación.
Por su parte, el presidente del Parlamento venezolano, el opositor Henry Ramos Allup, indicó que estas detenciones, así como las órdenes de captura contra Warner Jiménez, alcalde de Maturín (oriente), y contra el diputado Lester Toledo no son señales de que el Gobierno “quiera conversar o poner una tregua en su forma de proceder».
Estas detenciones y órdenes de captura se producen en el marco de una serie de movilizaciones a las que ha convocado la oposición reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para exigir celeridad en los procesos para celebrar un referendo que revoque el mandato de Maduro.
El jueves pasado se desarrolló una masiva marcha en Caracas a la que, según la MUD, asistieron más de un millón de personas y para este miércoles está prevista otra manifestación que se realizará en las principales capitales del país con el mismo objetivo de presionar por el revocatorio.
Maduro aseguró el pasado 1 de septiembre que su Gobierno derrotó un intento de golpe de Estado tras capturar a 92 paramilitares colombianos y a importantes dirigentes opositores que pretendían llevar a cabo una “emboscada violenta y fascista” durante la marcha opositora.
Según el jefe del Sebin, estos planes golpistas, que tendrían entre sus autores intelectuales al expresidente colombiano Álvaro Uribe, lograron ser frustrados el jueves pasado pero habrían sido postergados por sus ejecutores para el próximo miércoles, por lo que pidió al país mantenerse alerta.