Partidos “acosan” con política a  juntas de vecinos de barrios

Partidos “acosan” con política a  juntas de vecinos de barrios

El Distrito Nacional tiene 455 juntas de vecinos, agrupadas en 71 sectores establecidos oficialmente. Algunas de estas entidades comunitarias operan amontonadas y una muestra es el barrio Capotillo, donde fueron fundadas 15 juntas de vecinos, separadas apenas por calles y manzanas.

El problema con muchas juntas de vecinos es que son utilizadas por los partidos políticos, que filtran a sus dirigentes en sus organismos de decisión para que critiquen la política o trabajen a su favor, en el caso contrario.

La opinión es de William Espinosa, director ejecutivo del Patronato del Centro de los Héroes y ex director de Desarrollo con la Comunidad en el Ayuntamiento del Distrito Nacional.

Espinosa  considera que la expansión de las juntas de vecinos tiene que ver con la lucha entre sectores.

Según él, en el sector de Villas Agrícolas funcionan  siete juntas de vecinos, una cantidad considerable para la extensión de la barriada.

 La expansión -dijo- tiene que ver con la lucha entre sectores. Estas entidades son organizadas por perímetros, pero trabajan de manera independiente.

A su juicio, el arraigo de estas entidades al interior de los sectores  hace que los partidos políticos hagan intentos permanentes por manipular a sus dirigentes.

Expresó que el  trabajo actual de las autoridades municipales consiste en modernizar la obsoleta estructura de las juntas de vecinos. Lo que se persigue es que su integración responda a un esquema similar al de los departamentos de servicios del Ayuntamiento.

Espinosa está convencido de que las juntas de vecinos -como organizaciones democráticas del pueblo-, tratan de gestionarle solución a los asuntos prioritarios.

Sostuvo que las juntas de vecinos agrupadas en bloque se constituyen en una unión, encabezada por un presidente.

Instancias superiores.   Existen 27 uniones de juntas de vecinos en la capital del país.

Afirmó que tratan de que la política se aparte de los procesos, porque al Ayuntamiento no le conviene hacer procesos amañados. La fortaleza de un dirigente de junta de vecinos surge desde que el Ayuntamiento le entrega un carné que lo acredita como miembro de la organización.

Expresó que están convocando a las juntas de vecinos para que reestructuren su directiva.

Un problema en las juntas de vecinos se da cuando los presidentes quieren permanecer todo el tiempo en la directiva.

Espinosa dijo que en   abril pasado pusieron a circular el Reglamento de Juntas de Vecinos del Distrito Nacional,  que describe los lineamientos que rigen la organización, su misión, visión, estructura y objetivos.

El Reglamento fue aprobado por la Sala Capitular el año pasado, mediante la Resolución 171-07.

El protagonista

William Espinosa

Director departamental  del ADN

Función del Reglamento de Juntas de Vecinos del Distrito Nacional

 Como  colaborador del síndico Roberto Salcedo, durante sus seis años y medio de  gestión, Espinosa aprendió la importancia de la relación con la comunidad.

Asegura que el  Reglamento cambia su estructura,  comenzando porque se eliminó la función del vicepresidente y los tres vocales. Se le incluyeron, además, estructuras  viables a su funcionamiento, como son los encargados de Aseo, de Espacios Públicos, de Gestión de Riesgo y de Animación Urbana. El organigrama, explica el funcionario,   ahora tiene que responder a las prioridades del cabildo capitaleño.

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