POR LEONORA RAMÍREZ S.
Aunque en Nueva York los jueces son promovidos directamente por los partidos políticos, el proceso de selección es tan complejo y transparente que permite la independencia e integridad del sistema judicial de esa ciudad norteamericana, según explicó Rolando Acosta, juez de la Suprema Corte del Estado de Nueva York.

El magistrado de origen dominicano que ocupa ese puesto desde el 2002, se refirió en esos términos al responder preguntas relacionadas con la posibilidad de que, el poder político, puede incidir en las decisiones de los jueces que designa.

Durante su participación en el almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio dijo que si bien los jueces son electos en la boleta del partido, a éstos no se les permite emitir opiniones políticas ni estar en proceso de ese tipo, a lo sumo expresar que serán justos con los casos que conozcan.

La clave es mantener, en una sociedad regida por el imperio de la Ley, la independencia de ese individuo después que ha sido nombrado en esa posición.

Y una de las modalidades que se aplican en Nueva York es nombrar al juez por un tiempo superior al que dura el gobernador, como puede ser el juez de la Corte de Reclamo o de la Suprema Corte, dijo el magistrado.

Asimismo, expresó que los candidatos a jueces pasan por una serie de evaluaciones en las que intervienen no sólo los partidos proponentes, sino también el Colegio de Abogados, el periódico The New York Times, y otras entidades comunitarias.

Es un proceso bastante complejo y yo creo que eso mantiene la integridad e independencia de la rama judicial en el Estado de Nueva York.

La magistrada Julia Rodríguez, jueza de la Corte Civil del Condado del Bronx, en Nueva York, planteó en ese sentido que los jueces tienen que cumplir con una serie de normativas que fortalecen su independencia.

Manuel Méndez Olivero, juez de la Corte Civil del Condado de Nueva York, expresó sobre el mismo aspecto que en principio los magistrados son nombrados interinamente para ver cómo se desempeñan, pero una vez fijados en el puesto, por un período de diez años, sólo pueden ser destituidos por faltas tan graves como la venta de sentencias.

El PROCESO DE SELECCIÓN

El magistrado Acosta explicó que la selección de los jueces, en Nueva York, se hace de forma mixta. Los de la Corte de Reclamos del Estado los nombra el gobernador, y el alcalde designa los de la Corte Criminal y los jueces interinos de la Corte Civil. Los aspirantes a jueces de la Corte Civil tienen que participar en primarias directas, y luego por un proceso de calificación en el que interviene un panel creado por los partidos de Demócratas y Republicano.

Pero primero se solicitan postulantes con diez años de ejercicio profesional de calidad, y de ese grupo se escogen tres que pasan por un proceso dentro del partido, si son catalogados como altamente calificados.

Con relación a los jueces de la Corte Suprema explicó que no se hacen primarias en los partidos para su escogencia, sino una convención en la que los delegados judiciales son electos por el pueblo que decide quienes van a ser nominados.

Es una convención dentro del partido y tiene cierto criterio político también. Pero esa modalidad está en proceso de revisión en el Estado de Nueva York, y existe un debate sobre cuál es la mejor manera de seleccionar jueces, porque el mecanismo de nombramiento es político porque el gobernador o el alcalde son los que nombran.