SAN PEDRO DE MACORÍS. El presidente del Ministerio Evangelístico de Ayuda Profeta de Fuego, pastor Marcial Hernández, dijo consideró preocupante la situación de las familias que viven en los bateyes de esta provincia.
Hernández dijo que es lamentable la situación de precariedad de esos bateyes, y consideró que si no se toman medidas urgentes, no será el cólera que matará a muchas personas, sino el hambre.
Dijo que ese ministerio, con los pocos recursos que consigue, sólo puede ir a esos lugares cada 15 días a suplir un poco esas necesidades económicas.
Indicó que es necesario que el Gobierno acuda en auxilio de las familias que residen en esos lugares, y dijo que agradece a Dios la ayuda que le da para poder seguir llevando operativos médicos y de reparto de comida y ropa. Los operativos se han hecho en los bateyes Tabacón, Caimito y La Construcción.