Patrones culturales y falta educación impiden ir a médicos

Patrones culturales y falta educación impiden ir a médicos

Además de un problema cultural, el dominicano no gusta ir al médico porque teme que le diagnostiquen una enfermedad, y por la automedicación cualquier persona prescribe medicamentos.

Los doctores Freddy Ferreras, otorrinolaringólogo y Nelson Rodríguez, pediatra se refieren al tema, que fue objeto de un reportaje especial de Hoy.

Para Ferreras, el tema cultural pesa mucho en el país, lo mismo que la automedicación y que cualquier persona indica medicamentos para cualquier síntoma, sin estar facultado para ello.

“Eso ha estado cambiando un poco, ya las mujeres son más dadas a ir a revisar su salud a su ginecólogo y al internista”, asegura Ferreras, quien considera sin embargo, que en el país no se ha hecho una inversión para modificar patrones culturales poco saludables.

En el país no se hace promoción a la salud, ni se educa la forma en que la gente debe contribuir a cuidar su salud, insiste.

En el caso de los hombres, van al médico si tienen un dolor de pecho o un sangrado, de lo contrario no acuden, coinciden.

De su lado, el doctor Nelson Rodríguez Monegro considera que el dominicano tiene una alta tendencia a automedicarse y a resolver problemas de salud en forma individual.

Analiza que en los períodos festivos, las personas no quieren hacerse ningún examen analítico o diagnóstico, por miedo a que se le detecte una enfermedad en medio de las fiestas.

Sin embargo, existe una población muy pequeña de los dominicanos que gusta ir una vez al médico a hacerse un chequeo general, pero se trata de una población ínfima.

Una serie de trabajos publicados durante una semana, en el Hoy, pusieron en evidencia que el dominicano no tiene cultura de visitar la consulta de un médico a no ser que se sienta enfermo, a pesar de que el país tiene una alta incidencia de enfermedades no transmisibles, como la diabetes y la hipertensión arterial.

Promover. Los especialistas recomiendan que se promuevan estilos de vida saludables y que las personas revisen su salud, por lo menos una vez al año.

Las experiencias que acumulan los sistemas de salud explican que numerosas patologías pueden ser detectadas en forma temprana y ser tratadas.

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