LOS ÁNGELES. Pau Gasol no escondió su malestar por el duro varapalo que recibieron Los Angeles Lakers tras caer el viernes ante Los Angeles Clippers 123-87. Tres días después de que se quebrara el canje entre el español y Andrew Bynum, y mientras el equipo se encuentra inmerso en una mala racha en la que acumula 10 derrotas sobre 11 partidos, el ala-pívot confesó que los jugadores están perdiendo la confianza en sí mismos.
«Ahora mismo la confianza es baja. Tenemos que intentar recuperar buenas sensaciones, creer en nosotros y jugar como equipo en los dos lados de la cancha tanto en ataque como en defensa. Sobre todo en defensa porque estamos siendo realmente horrendos y eso es una preocupación más grande que otra cosa», afirmó
Pau estuvo sobre la duela 25 minutos en los que anotó 10 puntos, agarró ocho rebotes y brindó cinco asistencias, y no pudo ayudar a frenar a unos Clippers arrolladores que no tuvieron compasión con sus rivales y que les hundieron una crisis aún mayor.
Las dudas sobre si el equipo será capaz de plantarle cara a rivales tan duros como los Clippers son una realidad no sólo fuera del vestuario de los Lakers, sino dentro de él.