El movimiento cívico Participación Ciudadana afirmó ayer que la democracia moderna no puede estar dirigida bajo los preceptos de religión alguna, y sostuvo que el tema del aborto no debe ser parte del debate constitucional.
El director ejecutivo de la entidad, Javier Cabreja, llamó a los legisladores a hacer conciencia de que la República Dominicana tiene que avanzar hacia una real separación entre Estado y religión, sobre la base de principios democráticos como son la institucionalidad, políticas públicas y otros.
Hay que evitar las discusiones apasionadas y las posiciones extremas que se están dando en el marco del Congreso Nacional sobre el aborto, partiendo de que no es cierto que el debate sobre este tema a nivel de la Constitución implicaría su despenalización, como están intentando hacer creer algunos sectores, dijo Cabreja.
Calificó como una decisión desacertada de los sectores más conservadores de la comisión que elaboró el proyecto de reforma de la Constitución, modificar el artículo 30 sobre el aborto, y lamentó que el presidente de la República haya sido convencido para dejarlo.
No es cierto que como está el artículo 30 se estaría despenalizando el aborto, ese es un argumento engañoso que han radicalizado algunos sectores, ese tema lo que está es distrayendo e impidiendo que se pueda avanzar en la discusión de otros aspectos institucionales importantes para la reforma, dijo.