Pediatras reunidos ayer en un congreso internacional que  se celebra en Santo Domingo expresaron preocupación por las altas tasas de mortalidad neonatal que registra la República Dominicana. Sin embargo, la data que trae este año el Informe Mundial del Fondo de las Naciones Unidas  para la Infancia (UNICEF) tiene una mortalidad en neonatos situada en 14 por cada mil nacidos vivos. Estas muertes se registran durante los primeros siete días de nacidos.

El doctor Rodolfo Soto Ravelo, vicepresidente de la Sociedad Dominicana de Pediatría, al exponer ayer en el congreso de la entidad, que se celebra hasta mañana sábado en Santo Domingo, dijo que esa mortalidad se mantiene en 23 por cada 1,000 nacidos vivos, que representa el 80 por ciento de las muertes materno infantiles. El pediatra aseguró que la mayoría de las defunciones se pueden evitar con equipamiento adecuado, así como control de las infecciones, la prematuridad, el bajo peso al nacer y los traumas durante el parto.

Explicó que las causas de fallecimientos  en recién nacidos operados es multifactorial e incluye factores que van desde políticas de salud del Estado a inversiones pendientes y necesarias en los establecimientos de salud, tanto de tercero como de segundo nivel. El cirujano pediatra dijo que los fallecimientos de los neonatos se irán reduciendo con la presencia de personal especializado en los centros de salud.