El abogado Pedro Manuel Casals  aseguró que los cuestionamientos que le hiciera el procurador General de la República, Jean Alain Rodríguez, en la evaluación a los jueces a la Suprema Corte de Justicia (SCJ) a la jueza Miriam Germán Brito sobre su honestidad fue una investigación de un poder a otro.

«Eso no fue un motorista que tu le dices «caile atrás», eso fue un organismo de investigación de Estado, con personas en cubierto, acceso a video, equipos tecnológicos, acceso información privilegiada», ect».

Calificó el acto hecho por Alain como «un espectáculo grotesco y «asqueroso».

Manuel Casals dijo que si fue una «ciudadana común» que hizo esas acusaciones en una carta anónima en contra de Germán como dijo el magistrado Rodríguez que fue, «esa mujer debe ser fiscal e investigar el expediente de Odebrecht».

«Una ciudadana que da fechas y horas exactas, grabaciones, nombres y vinculaciones de personas, identificación propietaria,  y demás datos debe tener un cargo para denunciar a los maliantes», manifestó.

Entiende que el procurador no tiene la calidad para cuestionar la gestión de Germán, ya que esta tiene 40 años ejerciendo su labor de manera intachable.

«Los 40 años que tiene Miriam Germán trabajando, el procurador lo tiene de vida, además, a nivel de patrimonio declarado él tiene 20 veces más en bienes materiales que lo que ella tiene».

El experto en seguridad cuestionó realmente cuál es el papel que juega Jean Alain Rodríguez como miembro del Consejo Nacional de la Magistratura, ya que «él dijo que no podía revelar el nombre porque violaría la Ley del Ministerio Publico ¿Y usted está en el Consejo como Ministerio Público, como Procurador o miembro del Consejo ?.

«Él dice que no podía decir el nombre porque como Procurador porque  violaría la ley, pero él no estaba como procurador. Si está recibiendo una denuncia como Ministerio Público, entonces eso debes investigarlo pero no llevarlo a un Consejo».

Estás declaraciones fueron hechas al participar en el  programa «Súper 7 por la mañana».

El enfrentamiento. Todo inició cuando el procurador Rodríguez pidió la palabra con la intención de preguntar a Germán Brito, pero lo que hizo fue leer tres comunicaciones, dos de ellas remitidas a su despacho por una persona que rehusó identificar y por el juez José Gregorio Bautista, de la provincia Santo Domingo.

En las comunicaciones “anónimas” se hacen diversas imputaciones a la magistrada Germán Brito que van desde compra de viviendas, construcción de una villa, terrenos y reuniones ocultas con Víctor Díaz Rúa, imputado el caso Odebrecht. En las acusaciones se señala que la magistrada alegadamente puso propiedades a nombre de su hijo.