Pedro Martínez: Un resiliente social

Pedro Martínez: Un resiliente social

Vivir es una condición humana. Existir, implica asumir con conciencia la razón de existencia. Alcanzar el sentido de vida y de transcendencia, apenas unos pocos lo pueden lograr. Pero vencer obstáculos, quitar piedras del camino, derrotar prejuicios e imponerse en la exclusión y la desigualdad, es un acto de coraje, que solo los valientes de espíritu saben cómo hacerlo.

Pedro Martínez es una expresión social de un ser humano que impuso su talento, su disciplina y propósitos, frente a la mirada de la duda, del silencio con desanimo, del gesto desmotivador y de la descalificación. Es difícil que lo pueda lograr, decían por su poca musculatura, sus piernas delgadas y el aspecto de fragilidad que lucía. Lanzar a 85 o 87 millas quizás no sea consistente y perdurable para la exigencia de unas Grandes Ligas competitivas, exigentes, desgastantes y altamente estresantes.

Unos dudaban. Pocos creían. Pero el muchacho no se rendía. Era el producto de una familia donde los padres dejaban la piel en el día a día: lavando, vendiendo dulces, frituras y trabajando la tierra; soportando el sol, la lluvia y sereno. De ahí venía el muchacho, de la consistencia, la lucha, el sacrificio, la honestidad, los valores, la dignidad y los principios, que ayudan y construyen la autoestima, la identidad y la voluntad que, junto al carácter y el temperamento fortalecen la personalidad.

Pedro Jaime Martínez y Leopoldina fueron los referentes, junto a una escuela y a una profesora que le asumió y le marcó en su educación. Dice el tres veces ganador de CY YOUNG “Me siento orgulloso, humildemente, se lo dedico a todo aquel que admira lo que hacemos, espero que llegue el tercero, cuarto, quinto muy pronto y no esperen tanto tiempo”. Para dimensionarse más y hacer la diferencia dijo: “Cada vez que alguien se sienta en mi país como que necesita buscar fuerzas, que me mire a mí. “Soy una señal de esperanza”, allí mismo trascendía y se convertía en una referencia digna de imitar.

Para la Psiquiatría, cuando una persona viene de circunstancias económicas limitadas, excluyente y de condiciones psicosociales riesgosas, dada las carencias y vulnerabilidades del sector en que se desarrolla; y esa persona logra no ser parte del riesgo ni de las condiciones riesgosas y, logra propósitos, éxitos, valores, proyecto de vida, trascendencia y referencia social saludable, entonces, es una persona resiliente. O sea, alguien con inteligencia social, emocional y espiritual, que asume actitudes emocionales positivas para vencer, sin dejarse dañar y sin dañar a los demás.

Martínez, es un resiliente social que logró el éxito, la fama y la fortuna material sin la agonía de la despersonalización, motivado en lo que le gustaba, con disciplina y consistencia para soportar y resistir, dos conceptos que implican ganar. Su fortaleza estaba en su espíritu y su voluntad para creer en sí mismo, en su autoconfianza, y su auto-determinación para creer cuando otros dudaban. Hoy, Pedro Martínez es una referencia psico-social para los jóvenes deportistas y para el pueblo dominicano.

Alguien digno de imitar y de valorar como referencia de la resiliencia social, de tantos y tantas que viven y deambulan en los sectores marginados que solo piden una oportunidad. Martínez es una esperanza y, la esperanza es la pasión de lo posible y, lo posible, se construye en el día a día.

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