BRONX, Nueva York. – El estelar lanzador dominicano Pedro Martínez dijo este jueves que ha tenido que hacer ajustes en su estilo de juego para salir adelante en esta temporada. “He tenido que adaptarme un poquito a dejar de usar el poder y usar más la inteligencia y la experiencia”, dijo Martínez, al ser entrevistado en exclusiva para HOY tras el juego contra los Yanquis de Nueva York.

Como parte de los cambios en que ha incurrido para mejorar su desenvolvimiento en el montículo, Martínez calienta más temprano que de costumbre porque, según explicó, no se estaba sintiendo cómodo.

Martínez, quien en esta temporada tiene un récord de 8-3 con 3.74 de efectividad, expresó que su prioridad en este momento es mantenerse en forma.

“Yo solamente quiero mantenerme saludable para darle a mi gente y a mi equipo la oportunidad de verme y sobre todo el chance de ganar, que muchas veces se lo he podido ofrecer hasta ahora en el año”.

Durante esta campaña, el lanzador dominicano ha podido evitar las lesiones aunque un descenso en la velocidad de su recta al principio de la temporada llevó a pensar que el tres veces ganador del premio Cy Young estaba enfrentando problemas en su hombro derecho, el cual lo sacó del juego en la temporada de 2002.

Martínez se mostró satisfecho con su participación frente a los Yanquis, a pesar de que los Medias Rojas resultaron perdedores de la dramática contienda que se extendió por 13 entradas.

“Me siento bien, positivo gracias a Dios. No salieron las cosas como nosotros queríamos pero fue un juego excelente, exactamente lo que los fanáticos pagan por ver”, dijo Martínez, quien trabajó siete entradas en las que permitió cuatro indiscutibles y tres carreras limpias, incluyendo dos cuadrangulares.

Además, otorgó tres transferencias y ponchó a ocho jugadores para llegar a 105 abanicados en lo que va de la temporada. Esto coloca al dominicano en segundo lugar en ponches, tras Johan Santana de los Mellizos de Minnesota, quien encabeza la liga Americana con 112.

Aunque salió sin decisión, Martínez manifestó que no se arrepiente de la forma en que se manejó durante el juego.

“Cada pitcheo que hice lo hice con un propósito en mente. No se dio como queríamos porque, lamentablemente, somos humanos y no somos máquinas, pero en realidad no me arrepiento de haber hecho lo que hice”, dijo, aunque reconoció algunos errores.

“Fallé (en mi) localización con Posada, que dio un jonrón. Y Tony Clark bateó un buen pitcheo, hay que darle crédito a él. Todo lo demás hay que dejarlo ir”.

Martínez consideró que su equipo había batallado por la victoria y que ahora tenían que seguir adelante.

BOLAZO A SHEFFIELD

Hubo un momento de tensión en el Yankee Stadium cuando Martínez golpeó a Gary Sheffield con su poderosa recta.

Sheffield, visiblemente enojado, le gritó a Martínez y por un momento se pensó que se iba a armar una trifulca.

“Yo oí que me dijo algo como ‘a mí no, hermano, a mí no”, comentó Martínez más tarde. Según el lanzador, el bolazo no fue intencional.

“Es muy simple: yo pensé que el había visto que estábamos pidiendo curva y quise cambiar a recta alta, pues era el único sitio en que le podía hacer out”, explicó el dominicano.