Las escaleras de mano siempre han sido nuestras mejores aliadas al momento de buscar objetos en los gabinetes superiores de la cocina, cambiar un bombillo, limpiar las ventanas o pintar la casa.
Sin embargo, este utensilio no solo sirve para llegar a aquellos espacios que no podemos alcanzar. Los amantes de la decoración lo han acogido para darle un giro total a su funcionalidad original y convertirlo en un hermoso complemento para impregnar tanto ambientes interiores como exteriores de un toque de desenfado y originalidad.
Las escaleras tienen diversos usos que van desde toalleros, percheros, estantes, mesitas de noche, organizadores de vajillas, plantas…
¿Cómo colocarla? pues súper fácil, basta con ponerla en el rincón que quieras y comenzar a darle uso. Dependiendo de tus gustos, puedes decorarla o pintarla como mejor te convenga.
Si tienes a mano una escalera con la pintura desgastada, puedes inclinarte por el estilo “vintage”. Pero, si por contrario, la que posees tiene un acabado perfecto, de líneas rectas y material sin imperfecciones, tu escalera quedará bien dentro de un ambiente contemporáneo.
En la habitación. Una escalera en el dormitorio puede tener infinidad de usos. Tienes la opción de emplearla para colgar la ropa, los zapatos, las carteras… o como una mesita. Otro uso que puedes darle es como cabecero, colgándola a la pared.
En el baño. Una de las estancias donde las escaleras de mano tienen mayor cabida es el baño. Gracias a este original recurso, muchos de los clásicos y aburridos toalleros pasan a mejor vida. También puedes aprovecharlas para colgar de ellas cestos que te permitirán almacenar utensilios del baño como cepillos, peines, cremas…
En la cocina. Este es otro espacio que deja entrar las escaleras. Allí se les saca “el jugo” como elemento útil para colgar paños y delantales. Igual, te pueden servir para organizar la vajilla del día a día.
En la sala. En el salón se puede tener como mueble auxiliar junto al sofá, en lugar de la típica mesita, o si prefiere, como estantería para libros y demás enseres.
En el jardín. En el exterior las escaleras pueden ser muy funcionales para guardar las herramientas de jardín, también podrás usarlas para colocar las plantas como si de un jardín vertical se tratara.