El presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, Pelegrín Castillo, reveló ayer que el Estado ha pagado US$4,000  millones en los últimos cinco años en subsidio a la energía eléctrica y que la nación se está endeudando por un servicio maleado por el esquema de la política y los negocios que se hacen en el país.

En ese sentido, el legislador  propuso ayer al gobierno adoptar, con carácter de urgencia, un sistema de integración vertical en la industria eléctrica, mediante la creación de dos grandes empresas públicas, que no sean controladas por el Estado ni por el sector privado, sino por un consejo particular.

Expresó que pese a la gran inversión, no se solucionan los problemas centrales del país.

Sostuvo que  el sistema vertical estaría junto a la generación, la transmisión y la distribución. Cree que parte del problema es que las distribuidoras están muy acomodadas a administrar el subsidio, y las generadoras a demandar que les paguen.

Castillo  dijo que si el presidente Leonel Fernández  no acoge este sistema, el sector eléctrico deberá adherirse al modelo de la privatización o volver a la estatización.

Declaró que con las nuevas empresas que propone, el Estado gastaría menos recursos en subsidio y  que es insostenible e irracional el esquema eléctrico  que  ha entrampado a la nación, obligándola a mantener subsidio que en realidad aprovechan a las prácticas de rentismo empresarial, de clientelismo y de populismo político.

Criticó “la falta de voluntad política del Presidente”  para decidir unificar e impulsar una política nacional en una dirección u otra. Afirma que hay mucha dispersión en el sector eléctrico y que por eso, plantean la integración vertical, con las dos nuevas empresas, como se debatió en la mesa del sector eléctrico, en la pasada cumbre nacional.

La gran compañía

Pelegrín Castillo planteó “a mi me gustaría que los grandes usuarios sean parte de estas empresas”. Opinó que en vez de tener plantas auxiliares, en la que se invierte una cantidad de recursos enormes, o que los grandes grupos tengan empresas que venden energía al sector eléctrico, que se reúna una gran empresa, con reglas especiales, ya que daría más racionalidad y transparencia.

Falta voluntad

Criticó “la falta de voluntad política” del presidente Fernández para decidir unificar e impulsar una política nacional en una dirección u otra. Afirma que hay mucha dispersión en el sector eléctrico y que por eso, plantea la integración vertical, con las dos nuevas empresas, como se debatió.