El pimentoso bateador Luis Polonia, quien se autocalificó como el “el hombre que bateaba cables”, tiene muy fresco en su memoria los grandes momentos que vivió en sus actuaciones en Series del Caribe, donde logró varias coronas.
Al conversar con redactores de HOY, Polonia declaró con mucho orgullo que la sede que más le fascinaba asistir era en Puerto Rico.
“Mire, mi hermano, el calor humano de los dominicanos nos daban a nosotros en la década de los años 80, 90 y 2000 era algo fuera de serie”, dijo.
Expuso que podía ver en los rostros de esos miles de dominicanos la satisfacción de poder compartir con su equipo, con sus peloteros favoritos y siempre con banderas dominicanas en sus manos en el estadio durante varias horas.
Polonia expuso que la dominicanidad siempre alcanzó el punto más alto en las sedes de la Serie del Caribe en Puerto Rico. De eso no tiene ninguna duda.
La rivalidad. Sentenció que la rivalidad contra los equipos de Puerto Rico es algo que jamás olvidará, ya que la fanaticada dominicana residente en la Isla del Encanto iba a todos los juegos, con sus banderas y caras pintadas con la bandera nacional y eso le ponía los pelos de punta.
“Siento una gran satisfacción en mi corazón por haber sido parte de esa historia de la Serie del Caribe junto a los demás jugadores de las Aguilas y de los demás equipos cuando los reforzaba”, añadió.
El celo de los fanáticos:
Polonia recordó que en una ocasión estaba compartiendo en una discoteca con un grupo de amigos y algunos criollos divisaron a algunos peloteros y, “nos hicieron salir de la disco para el hotel para que descansáramos porque teníamos juego al otro día”.
Expuso que en las Series del Caribe por ser tan corta y con doble juego cada fecha, los días son muy intensos y no hay casi espacio para dormir, ni para practicar. “Puedo decir que me disfruté por lo alto todas las Series del Caribe que representé mi país cuando fue jugador activo”, subrayó el Inmortal del deporte dominicano.

Un juego memorable. Luis Polonia recordó que en una Serie del Caribe en México tuvo el gran honor de decidir el último partido y el campeonato a favor de la República Dominicana, gracias a un cuadrangular que conectó en la novena entrada.
“Ese choque fue contra México y con el juego empate y dos outs logré conectar un cuadrangular por el jardín derecho para darle el triunfo y la corona a mi país”, expuso.
Dijo que ese ha sido uno de los momentos más grande que ha vivido como pelotero dominicano jugando por República Dominicana.